La polémica generada por los audios desvelados por El Confidencial entre el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, y el empresario y futbolista del FC Barcelona Gerard Piqué tienen a la Real Sociedad como uno de los protagonistas involuntarios. No solo porque será el próximo rival culé con lo que supone en estas aguas revueltas (jueves 21, a las 21:30 horas, Anoeta), sino también por su participación en la Supercopa de hace dos ediciones (la que por la pandemia se disputó en Andalucía en lugar de Arabia Saudí) y por el ascenso del Sanse a Segunda División contra el FC Andorra, equipo del que es propietario Piqué y que él recordó en la comparecencia que ofreció la noche del lunes por Twitch: "Era para matarlo al árbitro, pero no pasa nada, es fútbol".

El futbolista quiso justificar que no por los negocios con los saudíes y la RFEF ni el Andorra ni el Barcelona donde él juega reciben ningún trato de favor. "Mírate el partido del año pasado Real Sociedad B-FC Andorra", le espeta en un momento determinado al periodista Alexis Martín-Tamayo (conocido como Misterchip), a quien recuerda que el FC Andorra acabó "con nueve jugadores y penalti en contra. Te lo puedo probar de muchas maneras, y quedamos eliminados. Era para matarlo al árbitro, pero no pasa nada, es fútbol. A veces intentamos ver donde no hay".

El encuentro de la fase de ascenso de la pasada temporada arrancó con un penalti a favor de la Real, por culpa de una mano dentro del área que decretó el colegiado Pozueta Rodríguez. Marcó Robert Navarro desde los once metros, pero enseguida empató el conjunto entrenado por Eder Sarabia, que a lo largo de los segundos 45 minutos se quedaría con diez futbolistas por la doble amarilla que vio Martí Vilà, ambas por agarrar y derribar a un realista cortando "un ataque prometedor".

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Ya en la prórroga, Álex Pastor vio la roja directa por una fuerte entrada a Jon Pacheco. Según recogió el árbitro en el acta, por "realizar una entrada al adversario con el pie en forma de plancha y con uso de fuerza excesiva en la disputa del balón". El Sanse derrotó después al Algeciras en la final por el ascenso.

"¿Crees de verdad que un presidente de la RFEF por un acuerdo del que se ha beneficiado la Federación va a coger un árbitro y le va a decir no, ahora pita a favor del FC Andorra?", espetó Piqué a Misterchip, que le respondió que, tras los acuerdos por la Supercopa de España entre RFEF, Arabia Saudí y Kosmos (la empresa de Piqué), "el problema no es cuando eliminan al Andorra y le echan a dos jugadores, el problema será cuando el Andorra sí se clasifique de esa manera".

"El problema no es cuando en un partido tuyo no pasa nada, sino cuando en un partido tuyo te perdonen una tarjeta roja", añadió Misterchip, que recordó a Piqué que ha "contribuido mucho a las teorías de las conspiraciones después de los partidos, aludiendo a otros partidos, has contribuido a ese teatro... El problema será cuando pase al contrario, el día que el Andorra suba y haya un arbitraje problemático, ahí habrá problema".

Con este escenario y sabido que el acuerdo por la Supercopa española penaliza que no participen en ella el Real Madrid o el FC Barcelona (distintas fuentes hablan que son cinco millones de euros menos por cada uno que no participe), las miradas se dirigen ahora al desarrollo de la Liga, a la vista de que vía Copa acudirán a la Supercopa los dos finalistas ya conocidos, el Valencia (que ya jugó la primera reformulada edición pese a las protestas) y el Betis.

El Real Madrid, con 75 puntos, apura las jornadas para cantar el alirón, mientras que la segunda plaza es la que está en el aire. Más tras la derrota del equipo de Xavi Hernández contra el Cádiz este lunes (0-1). Con un partido contra el Rayo por recuperar este fin de semana, el conjunto culé está empatado en la segunda plaza con 60 puntos con Sevilla y Atlético de Madrid. Pero no solo eso, sino que el Betis, con 57, y la Real, con 55, cuentan con opciones por sumarse a la pelea de la Champions.

Piqué podría estar en Anoeta

Por si esto fuera poco, el próximo encuentro del FC Barcelona será en Anoeta, donde podría volver Piqué tras la lesión que padece. La Real, sin David Silva tras ver la roja directa en el descuento contra el Betis por mandar "a la mierda" al árbitro, intentará lograr un triunfo que le acerque a Europa y, por qué no, le devuelva a la pelea por la Champions en la que ha estado en otras fases de la temporada.