Lee libros por trabajo y también por placer, aunque sea de una forma diferente. Son solo una parte de sus intereses, porque a este conocido periodista catalán de aspecto pausado y amigable lo que le gusta es la cultura en general. En sintonía con los nuevos tiempos no descarta la lectura digital, que considera una ventaja, aun valorando mucho el papel. "Lo importante no es el soporte, lo importante es la historia que se cuenta, y da igual dónde la leas", dice. Pide un apoyo sin condiciones a las librerías y que se mantenga en un futuro próximo ese aumento de lectura que se ha registrado en los más de dos meses de confinamiento por la pandemia.

Lleva usted trece años al frente de Página 2

No, y de hecho empecé en la radio, en Radio Barcelona, donde hacía programas de todo tipo. De manera casual, y estamos hablando de los años 90, había necesidad de sacar adelante un programa de libros que iba patrocinado, y cómo se sabía que me gustaba leer, me lo pasaron y fue una puerta que se abrió. A partir de ahí me empezaron a llegar proyectos de colaboraciones culturales.

Una casualidad que en su caso está durando mucho tiempo.

Es verdad, porque son los proyectos los que me han traído hasta aquí. Estuve en los inicios de la revista Qué leer, y después me contrataron en TVE en el circuito catalán para hacer un programa cultural, no solo de libros. Estuve también con Julia Otero en TV3 hablando de libros, en Barcelona Televisión me contrataron para hacer varios programas culturales.

¿Cómo llega Página 2

En 2007 me llamaron desde TVE, que en ese momento estaba sin programa de libros y me dijeron: Ahora mismo lo que necesitamos es un programa de libros un poco distinto. Me preguntaron si tenía alguna idea, yo tenía varias para hacer cosas diferentes, así que presenté un proyecto, y ese proyecto fue Página 2. Pero todo ha sido muy casual. La verdad es que he hecho Deportes, magacines de todo tipo, he estado en todos los horarios€ He trabajado, por ejemplo, en la radio en la edición de verano de A vivir que son dos días cuando el programa lo hacía Concha García Campoy, así que imagínate los años que han pasado.

Será casualidad en su relato, pero lleva 25 años entre libros si sumamos todos sus programas anteriores. ¿Nunca pensó que el proyecto de Página 2

Por supuesto. Lo que nunca pensé es que fuera a durar tanto, pero no solo porque Página 2 sea de libros, sino porque yo soy un culo inquieto y me gusta hacer muchas cosas diferentes, trabajar en varios proyectos a la vez, hacer radio, prensa, televisión€ Quien me conoce jamás hubiera pensado que iba a estar trece años en un programa de libros ni de cualquier otra cosa. Para llevarlo a donde ahora está, el espacio ha contado con la colaboración absoluta de Televisión Española, que ha apostado mucho por él, y también está el apoyo de las editoriales y de los escritores. Lo cierto es que han pasado estas trece temporadas sin darme ni cuenta.

"Hemos llevado los libros a la calle de la forma más dinámica"

Eso significará que se lo está pasando muy bien...

También tiene mucho trabajo y eso hace que el tiempo corra más rápido. Emitimos programas nuevos durante diez meses al año, y estamos a punto de llegar al número 500. Han sido años muy intensos, y quien sigue Página 2 sabe que no es siempre igual, que va cambiando, que constantemente damos un aire nuevo a las secciones, que cambiamos formatos, aplicamos cualquier nueva tecnología, cuidamos mucho el tema gráfico, el tema de localizaciones...

Es un programa con muchos exteriores.

Esa es la maravilla de este trabajo, y a veces también su dificultad. El tener muchos exteriores hace que estés sujeto a muchas dificultades, temas meteorológicos, viajes... No es lo mismo que hacer un programa en plató.

¿Cuál es la clave para que un espacio de libros perdure?

Quizá está en lo que hemos hablado, en hacer exteriores, en dar otra forma a la presentación de los libros, en enmarcar una historia en un escenario. Rompimos con una forma de hacer habitual y este es un programa muy a la francesa, muy a lo Pivot [presentador de Apostrophes en la televisión francesa]. Lo que hemos hecho ha sido llevar los libros a la calle de la forma más dinámica y televisiva posible. Es que en el fondo, no dejamos de hacer televisión.

Será usted un ávido lector desde niño, ¿no?

Sí. A mí siempre me ha gustado leer y siempre digo que soy hijo del Círculo de Lectores. Mi padre era socio y eso significaba ver llegar libros constantemente a casa, libros que ocupaban una parte muy importante de la librería. Yo me acuerdo de los tochos de José María Gironella, de Luis Martín Vigil y de otros muchos autores. Era un niño cuando empecé a leer aquellos libros, que ni los entendía. Fue la época en la que empecé a leer Edad prohibida, de Torcuato Luca de Tena. Esta fue una de las maneras de llegar a los libros, y otra fue tener un hermano cuatro años mayor, también muy lector, y que fue el que me dio a leer todo Herman Hesse, Harry Paul, García Márquez€

Una familia enamorada de los libros, vamos.

Sí, una familia en la que se leía. Pero tampoco diré que los libros han sido lo más importante de mi vida. No han sido más importantes que la música o que el cine. Siempre digo que para mí lo importante es la cultura. Soy una persona muy interesada en el mundo cultural. Me interesa el arte, me gusta ir a exposiciones, me gusta leer, me gusta escuchar música, ir al cine, veo series de televisión€ Me gusta la cultura, que forma parte de mi vida desde el principio.

"De media leo casi tres a las semana"

¿No le apetecería hacer un magacín cultural?

A veces pienso que sería feliz haciendo un programa que realmente fuera un cajón de sastre para meter un poco de todo en él, pero las circunstancias me han llevado a hacer un programa de libros. No me quejo, porque me permite poner música y que la música sea algo esencial, tocamos también el cine, aunque sea desde las adaptaciones literarias, y vamos a lugares llenos de arte. En el fondo, pienso que aunque es un programa muy de libros tiene un trasfondo mayor.

Si no es indiscreción, ¿cuántos libros lee usted al año?

De media leo casi tres a las semana, así que unos 130 libros al año, más o menos. Pero solo leo durante once meses al año.

¿Y eso? ¿Alguna promesa?

Ja, ja, ja€ ¿Promesas? No, o sí, no sé. En agosto no leo nada. Es un hábito que me inculcó un médico, que me dijo que era mejor para la vista y para la mente, y yo le he hecho caso desde que me lo dijo. Durante mis tres o cuatro semanas de vacaciones no cojo un libro.

¿Y no le es difícil mantenerse sin un libro entre las manos?

No me cuesta nada. Es curioso, incluso espero ese mes sin libros. Me relaja muchísimo. Si algo he perdido es el placer de la lectura, y no lo digo en el mal sentido, pero es la realidad. He perdido ese placer de la lectura por la lectura en sí misma. Ya no puedo evitar leer con mentalidad de trabajo. Todo lo que leo está vinculado al programa Página 2 o al espacio de libros que hago todas la semanas en A vivir que son dos días.

¿Ha perdido la pasión?

En cierta forma sí y en cierta forma no, pero cuando leo siempre tengo otra mirada y pienso: Esto le iría muy bien al programa. ¿De qué manera puedo hacer llegar esto a los espectadores o los oyentes? Así que siempre que leo, leo pensando en trabajo. Sí que lo disfruto, pero siempre está presente el trabajo, porque además leo con un papel y un bolígrafo. Así que agosto significa descansar.

Y si coge un libro en agosto€

Significa que estoy pensando en septiembre, en el programa. Mi manera de no pensar en trabajo es no leer libros. Sí leo prensa, revistas y otras cosas, pero libros no, y me viene estupendo, porque llego fresco al trabajo y comienzo a leer a saco de nuevo.

Es previsible pensar que tiene la casa llena de libros, ¿no?

Ya no. Quite muchos y me quedé con unos pocos. Fue un duelo, pero lo tenía que hacer. Tenía unos 16.000 libros, más o menos, acumulados de toda una vida de trabajo, de comprar, de regalos€ Ahora debo tener unos dos mil y pico.

"Soy muy fan de El conde de Montecristo de Dumas"

El conde de Montecristo

Si vamos por los tópicos, tendría que hablar de su libro favorito, de aquel que le cambió la vida, de esa historia fetiche€

Pues no, no tengo un libro favorito ni tampoco ningún libro que me cambió la vida. A mí me ha ayudado a mejorar mi vida la lectura de muchos. Es cierto que hay libros que leídos en un momento concreto de tu vida o con una circunstancia personal especial adquieren un valor que no tendrían si los lees cinco años antes o cinco después. Hay lecturas que marcan la vida dependiendo del momento.

¿Y si se le pregunta por su género preferido?

El de aventuras. Soy muy fan de El conde de Montecristo de Dumas, que me encantó leerlo y me encanta releerlo. Pero también me gustan otros géneros, Galdós, del que ahora se celebra el centenario, me parece un autor de lectura obligada. Delibes es otro de mis autores preferidos, como Carmen Martín Gaite€ ¿Cómo te puedes quedar con un libro? Te diría uno y luego colgaría el teléfono y pensaría: ¿Por qué no le he dicho este o este otro? Son muchos autores, y es lo mismo que te digan de escoger un director de cine o una canción. Imposible.

La media hora que dura su programa se hace muy corta. Quizá una hora dejaría más satisfechos a los seguidores del programa.

Me gusta que se queden con las ganas, y no, no podemos hacer una hora de programa. Para hacer esta media hora que tenemos estamos toda la semana rodando, montando y preparando. Antes me preguntabas cuántos libros leo; pues bien, no es solo lo que lees y aparece en el programa, es también lo que descartas. Esos tres libros semanales que he dicho, de alguna manera u otra aparecen. Pero, ¿y los que no aparecen? Esos libros de los que has leído ochenta páginas y los apartas también dan trabajo. No sabes hasta qué punto un final de dos minutos puede resultar un trabajo enorme.

¿Por qué?

Pues fíjate, a lo mejor para esos dos minutos en los que se lee un fragmento de un libro, hemos cogido un coche y hemos hecho 150 kilómetros para buscar un lugar que televisivamente sea el adecuado. Fíjate, son 300 kilómetros entre la ida y la vuelta para dos minutos de televisión.

¿Y merece la pena?

Estoy convencido. Al final, el espectador va a acabar agradeciendo el cariño que tú pones. Página 2 supone mucho trabajo, hay secciones muy variadas: entrevistas, poesía, cómic, infantil, reportajes, cine€ Cada pieza requiere su tiempo, aunque luego de emisión parezcan muy cortas. Lo disfrutamos, pero da mucho trabajo. Trasladar lo que hacemos a una hora sería un esfuerzo infinito. Significaría más equipo, más costes, y complicaría mucho el programa.

Hay voces que indican que se están publicando demasiados títulos, ¿las ha escuchado?

Siempre se ha publicado mucho. Lo que las editoriales quieren es tener copado unos metros de estantes en las librerías. Sí que ha habido momentos en los que han hecho el esfuerzo de resumir títulos, porque es evidente que este país no tiene lectores para poder absorber todo. Pienso que se tendría que reducir el número de publicaciones y que las que salgan estén bien escogidas, bien cuidadas, con unas buenas portadas, buena calidad del papel, buena tipografía, buenas traducciones€

Quizá sería una solución que el número de lectores aumentara...

Esa sería la mejor, y en esta situación en la que estamos he leído que se había incrementado en un 68,3% la cantidad de horas de lectura. Rezo ahora para que esa cifra no baje cuando se normalice todo. Estaría bien que aquellos que se lo han pasado bien con la lectura, siguieran con ella. Estaría bien que apoyen y que vayan a las librerías, que van a necesitar de nuestra presencia. Dediquemos más tiempo a la lectura, que requiere tiempo y disciplina, un espacio y un silencio, una luz concreta... Leer debe ser siempre un placer.

Personal

Edad: 59 años.

Lugar de nacimiento: Barcelona.

Inicios: Su carrera profesional como periodista se inició en Radio Barcelona.

Trayectoria: Después de quince años hablando de libros en A vivir que son dos días en la Ser y de trece al frente de Página 2, señala que tanto su llegada al mundo de la cultura en general y de los libros en particular fue un tanto casual. Antes había hecho Deportes y había estado en magacines de distintos contenidos y en diferentes horarios. Es un apasionado del cine, la música y de perderse en exposiciones. Ha trabajado también en TV3 y en Barcelona TV.

Aficiones: Como lector le encanta el género de aventuras. Nunca lee en las vacaciones de agosto.