- La primera vuelta liguera de la Real terminó el sábado con derrota en el Sánchez Pizjuán. El equipo blanquiazul alcanza el ecuador del campeonato con 30 puntos (uno menos que el año pasado), la sensación de que con el tiempo su física propuesta pierde fuelle y una estadística demoledora. Solo dos de los mencionados 30 puntos se han sumado ante equipos clasificados entre los seis primeros (Atlético, Madrid, Sevilla, Villarreal y Barcelona, además de la propia Real). Es el balance, hasta la fecha, de una competición que cronológicamente se está desarrollando así:

un inicio extrañísimo

En tiempos de pandemia, todo resulta extraño. Lo fue para la Real el inicio liguero, condicionado por varias circunstancias. Para empezar, la plantilla txuri-urdin se vio especialmente afectada por casos positivos de COVID-19 durante la pretemporada, lo que llevó a los blanquiazules a presentar en Valladolid en la primera jornada un equipo bastante alternativo. La preparación estival, además, había sido de todo menos normal, por una cuestión de tiempo y de descanso previo: los jugadores apenas disfrutaron de tres semanas de vacaciones y entrenaron durante otras cuatro antes del estreno oficial. Y a todo ello cabe añadir que tanto el propio Pucela como el Real Madrid y el Elche disputaron ante los blanquiazules sus primeros encuentros del curso, con merengues y alicantinos habiendo competido hasta bien entrado agosto (Champions y play-off de ascenso). Con cinco puntos de nueve posibles, la Real solventó con nota un arranque raro.

bendita normalidad

Llegó luego un punto en el que los partidos comenzaron a ajustarse a los estándares de la normalidad: equipos relativamente rodados, plantillas de disponibilidad casi total... Y la Real pareció agradecer este nuevo panorama, por mucho que la inauguración del mismo significara una injusta derrota en Anoeta contra el Valencia (0-1). Tras el tropiezo frente a los de Javi Gracia, el equipo de Imanol adquirió velocidad de crucero y sumó seis victorias consecutivas en el campeonato, compaginando además a las mil maravillas Liga y Europa League. La derrota ante el Nápoles supuso también una especie de accidente, rodeada por los triunfos ante Rijeka y AZ. Para ser justos, eso sí, cabe recordar que los tres puntos sumados en casa contra el Granada (2-0) supusieron una especie de paréntesis dentro de la mencionada normalidad: los protocolos anticoronavirus de la Liga obligaron a los andaluces a viajar a Donostia con un equipo de circunstancias, lo que la Real aprovechó para obtener una victoria de mero trámite. No brillaron ese día los txuri-urdin como sí lo hicieron durante todo este período, incluido el 0-1 de Cádiz con el que la racha alcanzó su punto final.

a menos

Tras el triunfo del Ramón de Carranza, la Real viajó a Alkmaar para iniciar esa fase de la liguilla europea en la que cada gol y cada punto valían su peso en oro. La exigencia continental subió enteros y alternar dos competiciones con garantías se fue convirtiendo en un objetivo cada vez más complicado. El equipo lo acusó en forma de lesiones que cargaron de minutos a determinados futbolistas, con lo que se perdió esa chispa final que antes traducía en goles el buen juego txuri-urdin. Este se mantuvo, en líneas generales, durante largos tramos de los partidos, pero los de Imanol no lo plasmaron en el marcador y lo que hasta entonces eran triunfos se convirtieron en empates ante Villarreal, Eibar y Alavés. La trayectoria, en cualquier caso, implicaba ir a menos, cosa que quedó confirmada con las derrotas sufridas ante Barça, Levante y, sobre todo, Atlético.

después de navidad

Después del miniparón navideño, la Liga regresó con triunfo en San Mamés. Posiblemente empujada por su tempranero 0-1, la Real fue más pragmática y menos generosa en Bilbao, mostrando un registro aparentemente más propicio para su condición y que no le hemos visto ante Osasuna y Sevilla, partidos que ha encarado de nuevo fiel a su idea original.

Partidos

30

La Real ha sumado un total de 30 puntos durante la primera vuelta de la Liga, por los 31 con los que concluyó el mismo período en el campeonato 2019-20. Entonces terminó clasificándose para la Europa League (sexta) tras concluir el campeonato con 56 puntos. Así, su proyección actual implica mejorar la cifra final del pasado curso.

2

Los empates cosechados en Anoeta contra Real Madrid (0-0) y Villarreal (1-1) significan los dos únicos puntos que la Real ha sumado en sus enfrentamientos directos con los equipos de la zona alta de la clasificación (los seis primeros). Los 28 restantes se han obtenido contra los demás conjuntos de la Liga, incluidos los logrados contra un Granada séptimo (en posición europea) pero que viajó a Donostia con una convocatoria de circunstancias.