A un partido de la conclusión de la liguilla de semifinales del Bizkaia Open de pala, parecía una utopía que Román Maldonado y Asier del Río se pudieran clasificar para la final. En su casillero, dos derrotas. Necesitaban un triunfo holgado sobre Esteban Gaubeka e Iker Gordon. Pues bien, el campeón del Individual y el zaguero de Lezama se pusieron el mono de trabajo y le dieron la vuelta al calcetín: 10-8, 10-6 y 10-5 para meterse de lleno en la cita por el título; precisamente, ante los veteranos vizcainos. El Bizkaia de Bilbao despliega este sábado su gran alfombra negra para la revancha, a partir de las 17.00 horas. En esta ocasión, está en juego la txapela.

Román acumula cinco finales seguidas: perdió la del Pala Tour, ganó la Liga Kutxabank y el Individual y cayó en Mungia. Es el palista más en forma del panorama. “Estoy contento por haber vuelto de una lesión de tobillo y encontrar regularidad y este nivel”, argumenta el argentino. “Vengo haciendo las cosas muy bien. El balance es muy positivo”, disecciona.

Sobre el precedente de la liguilla de semifinales, el de Venado Tuerto considera que no hay que darle ninguna “importancia”. “Ellos estaban ya clasificados y no se jugaban nada. Tenemos que entrar a todo o nada, como hicimos en la semifinal. Si conseguimos compenetrarnos, tenemos mucho hecho. La clave es jugar por dentro y evitar a Esteban”, destaca Maldonado.

"El año pasado jugué tres finales y perdí las tres. Esta temporada no he llegado a ninguna final. Esto es ganar o ganar. Hemos sido irregulares. El sábado pasado no anduvimos bien por algunos problemillas. Saldremos a morir", reseña, por su parte, Gaubeka, quien reconoce que "tenemos que salir a atacar nosotros. Iker abre muchos huecos". El de Armintza y el de Sopela perdieron la final del año pasado ante Madariaga-Urrutia (10-7, 9-10, 2-10, 10-7 y 4-10). "Queremos sacarnos la espina", afirma 'El Gallo'.  

El material

Para tratar de contrarrestar a Maldonado y Del Río, Gaubeka y Gordon optaron en la liturgia con el material por "pelotas pesadas, para que no puedan dominar fácil a Iker y le atropellen en el rebote. Así, puedo jugármela más fácil".

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En ese sentido, Maldonado revela que “nosotros nos decantamos por pelotas más rápidas, que boten hacia arriba para complicar a Iker”.