- El Borussia Dortmund goleó ayer (4-0) al Schalke 04 en el duelo más destacado del regreso de la Bundesliga, tras un parón de dos meses por culpa del coronavirus, tres puntos con los que mete presión al líder Bayern Múnich, que juega esta tarde.

Alemania inició a las 15.50 horas de ayer el camino que esperan seguir el resto de grandes ligas de Europa dentro de un mes, y volvió a la competición como aspiran LaLiga, el Calcio y la Premier: sin público y en medio de un riguroso protocolo sanitario.

La Primera División alemana dejó seis resultados en este primer turno y volvió en parte donde lo dejó, con Haaland demostrando ser su delantero de moda. El joven noruego marcó un gol histórico, el primero tras el coronavirus, en una jugada al primer toque a la media hora, con tacón de Brandt y asistencia de Thorgan Hazard.

Estos tres jugadores y Guerreiro bailaron a un Schalke que empezó presionando, pero que en 15 minutos estaba ya sometido. Apenas asomó a la portería rival el equipo minero, y Hazard y un doblete de Guerreiro golearon en la exhibición ofensiva de un Dortmund sin su muro amarillo en la grada pero dueño del Derbi del Ruhr.

El Schalke no cambia la racha de antes del parón, con su octavo partido sin ganar y fuera de Europa, mientras que los del Signal Iduna Park suman 54 puntos, a uno del líder Bayern. El tercer equipo en persecución a la cabeza, el Leipzig, tropezó (1-1) con el Friburgo, con lo que puede ver escaparse a siete puntos el liderato si hoy gana el Bayern al Unión Berlin.

El fuerte inicio dejó pronto sin gasolina al Leipzig, mientras que el Friburgo aguantó y se adelantó por medio de Manuel Gulde. El Leipzig no reaccionó hasta la segunda parte y empató por medio de Poulsen. Perdonó el equipo de Champions, en especial por medio de Lookman, y dio gracias al VAR para salvar incluso el empate, por un gol anulado a Robin Koch en el descuento.

Además, un gol sobre la bocina de Daniel Ginczek coloca al Wolfsburgo en zona europea, con un 1-2 al Augsburgo. Con intención de engancharse a esa zona noble, el Hoffenheim se llevó un correctivo (0-3) del Hertha Berlin, mientras que en la lucha por evitar el descenso, el tercero por la cola Fortuna Dusseldorf empató sin goles con el colista Paderborn.

Además de jugarse sin público, la Bundesliga empezó ayer a aplicar un estricto protocolo, con medidas como estas: Todos los jugadores se someten a un test de coronavirus en víspera del partido. Los titulares salen al campo separados de los suplentes.

Los suplentes deben usar mascarillas y mantener la distancia de seguridad.Se elimina el intercambio de saludos entre los equipos, de los capitanes y con el trío arbitral.

Se elimina la foto del equipo titular.

Solo hay cuatro recogepelotas y se desinfectan las manos y los balones cada vez que intervienen.Se prohíben abrazos o tocarse las manos para celebrar un gol.

Al término del partido se evita todo contacto con los compañeros, los rivales y el cuerpo arbitral, y cada jugador se ducha en su domicilio o en el hotel.

Solo acceden diez periodistas por estadio y la atención a los medios es telemática.

"Puedes oír a todos los jugadores y entrenadores. Es como ver una sesión de entrenamiento"

Explicando sus sensaciones al ver por la televisión un o de los partidos de ayer.

26ª JORNADA