Este 10 de enero pasará a la historia del deporte como el día en el que el balonmano regresó a un campo de fútbol para batir el récord de espectadores en un partido. En concreto, han sido 53.586 los asistentes a la jornada inaugural del Campeonato de Europa que organiza Alemania y que al confeccionar su candidatura, eligió el Merkur-Spiel Arena de Düsseldorf como el punto de partida de una aventura que terminará el 28 de enero en Colonia.

En su señalada inauguración ha vuelto a mediados del siglo XX para vivir los triunfos de Francia y Alemania contra Macedonia del Norte (39-29) y Suiza (27-14). Olímpico en los célebres Juegos de 1936 en Berlín (100.000 personas en la final Alemania-Austria, 10-6 para los alemanes), el balonmano se jugaba entonces con once jugadores, campos de entre 90 y 110 metros de largo y entre 55 y 65 metros de ancho, porterías como las de fútbol y dos partes de 30 minutos. Su popularidad, con 93.000 asistentes al duelo entre la RDA y la RFA en Leipzig en 1959, se prolongó hasta mediados de los años 60. El balonmano a 7 y en pista empezó a crecer de manera fulgurante: en Alemania arrancó de forma oficial en 1946.

El mismo país ha comenzado a lo grande el primer Europeo que organiza en su historia, con casi 55.000 espectadores en el Merkur-Spiel Arena, pero ¿cómo se ha llegado a esta jornada inaugural?

Tres años de trabajo entre muchos agentes han desembocado en cuatro horas históricas para el balonmano. La Federación Alemana aprobó la propuesta a finales de 2020: cabía la opción de que la jornada inicial, con la costumbre de que juegue la selección anfitriona, se podía disputar en un campo de fútbol. A lo grande.

La final del Europeo masculino de Estocolmo el año 2020 se disputó en un campo de fútbol (Tele2 Arena), sí, pero a diferencia de entonces, la pista de balonmano no iba contra un fondo, con una grada lateral sobre el césped, sino que la pista se encuentra en el centro del Merkur-Spiel Arena, rodeada de gradas montadas a tal efecto con 9.000 asientos.

El hecho de ser una ceremonia inaugural añadía más complejidad al asunto. “Se necesita mucha más tecnología de iluminación y audio que para cualquier partido”, explica el responsable de Eventos Internacionales de la Federación Alemana, Thomas Freyer, a la web de la EHF.

Arranca el montaje

Horas después del Fortuna Düsseldorf-Holstein de la Bundesliga 2 de fútbol el 10 de diciembre, arrancó la fase decisiva de la conversión, con 25 kilómetros de cables, 250 altavoces, 450 metros cuadrados de pantallas led, 500 focos de iluminación y 50 camiones para transportarlo todo. “Düsseldorf era el único estadio de fútbol de Alemania que cumplía con todos los criterios” que se requerían cuando, explica Freyer, la Federación Alemana abrió la puerta a una jornada inaugural por todo lo alto. En 2021 la EHF realizó la primera inspección de la infraestructura y un grupo de expertos ha trabajado en dos apartados: la experiencia in situ, tanto para deportistas, aficionados y periodistas, como la retransmisión televisiva.

La retransmisión será excelente desde el primer día, ya que, por ejemplo, incluso hemos conseguido instalar una cámara araña para este día de partido”, avanza Hannes Müller, jefe del departamento de la EHF que se encarga de organizar el Europeo.

Cubierto el campo de fútbol, una tarea ha sido cerrarlo, con el objetivo de que en todo momento haya al menos 22ºC en la instalación. Algunas fases de los trabajos de preparación han requerido la presencia de más de 100 trabajadores a la vez en el campo.

En paralelo, el reto era llenar el campo. ¿Sería posible? El balonmano en Europa cuenta con un gran evento-espectáculo, la mayor cita indoor deportiva de la temporada europea. La Final Four masculina de cada final de temporada en Colonia desde el año 2010, cuando desapareció la final a ida y vuelta, congrega a los cuatro mejores equipos de la Champions. El título en juego en un fin de semana ante 20.000 personas en cada partido. Pero ¿cómo llenar un campo de fútbol con más de 50.000 almas?

Las dudas quedaron resueltas incluso antes del sorteo de los grupos. Cuando el mismo campo de fútbol de Düsseldorf acogió en mayo de 2023 dicha cita, ya se habían vendido 40.000 entradas. La intensa colaboración entre el Comité Organizador, la EHF y las autoridades locales, cuya ayuda a los agentes promotores termina resultando clave, ha permitido un éxito que supera récords anteriores.

El Merkur-Spiel Arena de Düsseldorf, listo para el inicio del Campeonato de Europa de balonmano Christopher Neundorf / Efe

Anteriores récords

En 2012, el extinto Copenhague acogió a más de 36.000 hinchas en su partido de cuartos de final de la Champions contra el FC Barcelona y dos años después, el Día del Balonmano Alemán llevó a 44.189 espectadores al campo de fútbol de Frankfurt para disfrutar del partido entre Rhein-Neckar Löwen y el Hamburgo. Ese listón, que salvo el fútbol de elite solo un show como la NBA ha sido capaz de superar con facilidad, estaba alto.

“La EHF y el Comité Organizador de la Federación Alemana elaboramos una estrategia de promoción conjunta que incluía todo tipo de actividades promocionales, como llevar a Düsseldorf el sorteo del Europeo, pero también campañas en las plataformas digitales. La estrategia funcionó de maravilla”, resume Müller, con quien comparte valoración el director ejecutivo de la Federación Alemana, Mark Schober: “Estamos abrumados por la velocidad con la que se vendieron miles de entradas”.

Más en un país que al comienzo del verano acogerá la Eurocopa de fútbol masculino. En palabras de Schober, “la forma en que se vendieron tantas entradas da aún más importancia a la EHF EURO 2024, y pone en evidencia el entusiasmo no solo de la audiencia del balonmano alemana, sino también de la europea”.

Cubierto el primer gran reto, que semejante escenario tuviera una gran asistencia, llega el siguiente: que este hito se convierta en un gran empujón hacia adelante, tanto para el resto de sedes del Europeo como para el deporte continental. Así lo cree Hannes Müller: “Esta experiencia supondrá un gran impulso para el balonmano, no solo en Alemania sino también en otros países y mercados clave de Europa”.

Primera jornada

Grupo A (Düsseldorf-Berlín)

  • Francia 39-29 Macedonia del Norte.
  • Alemania 27-14 Suiza.


Jueves, 18 de enero

Grupo D (Berlín)

  • Eslovenia-Islas Feroe (18:00 horas).
  • Noruega-Polonia (20:30 horas).

Grupo E (Mannheim)

  • Países Bajos-Georgia (18:00 horas).
  • Suecia-Bosnia & Herzegovina (20:30 horas).

Grupo F (Múnich)

  • Portugal-Grecia (18:00 horas).
  • Dinamarca-República Checa (20:30 horas).


Viernes, 19 de enero

Grupo B (Mannheim)

  • Austria-Rumanía (18:00 horas).
  • España-Croacia (20:30 horas).

Grupo C (Múnich)

  • Islandia-Serbia (18:00 horas).
  • Hungría-Montenegro (20:30 horas).