Bajo un ambiente inmejorable, el restaurante Aratz de Donostia acogió ayer una cena maridaje que combinó siete platos de cocina tradicional de primera categoría con una cuidada selección de vinos y cavas de la bodega Parés Baltà. La velada formó parte de la celebración del 36 aniversario del Aratz, un año especial en el que, además, Xabier Zabaleta, quien no pudo asistir por encontrarse fuera de Donostia, anunció que en enero comenzarán las obras de su nueva bodega.
Parés Baltà, una casa familiar fundada en 1790 y con una larga trayectoria en vinos y cavas ecológicos elaborados con uvas propias del Penedès, fue la encargada de guiar la cata. La colaboración entre el Aratz y la bodega catalana viene de largo, y quedó reflejada en un acertado maridaje que acompañó cada uno de los platos elaborados por el chef Iker Zabaleta.
Entre los asistentes se encontraban, entre otros, Nagore Rodríguez, coordinadora de Jakitea; el periodista gastronómico Josema Azpeitia; y Xabier del Valle de Lersundi e Isabel de Lope, ambos de NOTICIAS DE GIPUZKOA, que disfrutaron de una propuesta que puso en valor el producto y la cocina tradicional.
Un menú suculento
El menú comenzó con unas antxoas de Getaria con mermelada de tomate y una ensalada de ventresca, antes de dar paso a los txipirones Pelayo y los callos de bacalao con jamón Basatxerri. Siguieron unas habitas peladas con hongos y huevo ecológico, y una carrillera de ternera con salsa de vino tinto y puré de patata. Para el apartado de quesos, se sirvió una selección de la quesería alavesa Azkarra, ahumados y sin ahumar, antes de rematar con el postre “Gorrotxa” de Rafa Gorrotxategi, y café.
Una cita que unió cocina tradicional, producto local y vino de calidad, y que dejó claro que el Aratz afronta el futuro con nuevos proyectos y la misma fidelidad a la calidad gastronómica.