Dice usted que el profesional de enfermería es un cuidador integral, no quien nos pone una tirita.

Diría que vivimos en un momento o cultura de prisa e inmediatez. En la población joven se percibe el deseo de solucionar el problema de salud de forma inmediata. Y si hace falta, pagando, pero ya.

¿Qué quiere decir?

Quiero decir, si tengo dolor de rodilla y sé que si voy al particular, un traumatólogo me va a ver enseguida y va a pedir pruebas y en el mismo día quizá me da los resultados. Y en ese sentido, en Osakidetza hay que dar muchas vueltas. Pero otra cosa es hacer lo mismo sabiendo que la persona tiene otros problemas añadidos. Y ofrecer un cuidado integral. Eso es lo que hemos perdido. El objetivo de la Atención Primaria era dar herramientas a la población para su enfermedad; o si era crónico, darles formación para que sean autónomos, para que conozcan su enfermedad, y detectar algunas señales a modo de alarma, si sucede algo. Hoy en día, ha cambiado la mentalidad y el covid ha sido el remate. Da igual qué tenga, o qué medicamentos tome, quiero una solución ya, arreglarlo enseguida.

¿Es generacional?

La sociedad y la forma de vivir han cambiado. Lo que quiero decir es que no ha habido una adecuación a la realidad por parte de Osakidetza. Tenemos que detectar las necesidades y problemas existentes en nuestro entorno y educar y formar para dar seguridad y tranquilidad a los ciudadanos en su salud.

"La sociedad y la forma de vivir han cambiado y no ha habido una adecuación a la realidad por parte de Osakidetza"

¿Y los recursos?

Estamos cada vez menos profesionales y es muy grave saber que haciendo esta especialidad y que van a tener trabajo seguro, los médicos jóvenes prefieran irse. En el último año han quedado libres 300 plazas.

¿Y por qué cree que sucede?

Supongo que porque no es atractivo. Una compañera de Ordizia me decía que no salimos de un sitio por tener mucho trabajo, sino por no trabajar a gusto. Quien se va de un sitio, no lo hace para tener menos trabajo, sino para salir del trabajo con la satisfacción del trabajo bien hecho y volver al día siguiente tranquila y con confianza.

¿Es este un trabajo vocacional?

Nuestro trabajo en sí es muy gratificante, agradecido, porque ves que has ayudado a una persona. Eso no quiere decir que se va a curar de forma inmediata. Quizá incluso tenga una enfermedad muy grave, o terminal, pero si ve que le ayudas, va tranquilo y los familiares también acuden con confianza. Eso también es nuestro trabajo. Y no ir a prisa y corriendo con la sensación de que no llegas. Y creo que algunas personas, tanto pacientes como profesionales sanitarios, necesitamos quedarnos satisfechos, conocernos mutuamente.

Hablan también de la burocratización. ¿A qué se refieren?

Todos hemos tenido una gripe y sabemos que el primer día tenemos tos, luego fiebre y si llevamos tres días con fiebre, pues entonces sí, vamos al médico. Te dicen: Tengo dolor de garganta. ¿Y fiebre?: No, pero por si acaso he venido para saberlo cuanto antes. ¿Qué sucede en esos procesos?, que hay trabajo burocrático, normalmente necesitamos la baja. Para pedir la baja, te coge una persona el teléfono, y luego tiene que pasar sí o sí por el médico. Ahora quieren que los enfermeros cojamos la responsabilidad de estas ILT (Incapacidad Laboral Transitoria). Creo que estamos pasándonos la carga de trabajo unos a otros sin criterio, pensando que estos están más libres, pero a lo mejor los que se tienen que encargar son los de la Inspección de Trabajo y no el ambulatorio.

¿Hacen falta más recursos entonces?

Sí, humanos y materiales. Y deben de acompañarse de un estudio para saber cuál va a ser nuestro trabajo por las necesidades de las diferentes poblaciones y tener un feedback con nuestro responsable para intentar, entre todos, hacer las cosas mejor y facilitarlas. Y está claro que necesitamos formación. Igual los administrativos de la entrada necesitan otra titulación. Igual tienen que pasar a ser administrativo sanitario. Eso no quiere decir que hagan la función de médico, pero sí que tengan cierta habilidad y para aprender eso hace falta tiempo.

Hablan de falta de estabilidad.

Un gran problema en Osakidetza es la eventualidad y la inestabilidad. Pedimos dar estabilidad a grupos de trabajo compuestos por médico o pediatra, enfermera, administrativo y el apoyo del trabajador social. Y que el usuario no tenga que contar su problema de salud una y otra vez. También resulta chocante que en nuestra categoría, enfermería, se haya creado la especialidad en comunitaria, enfocada en el trabajo de primaria, que son otros dos años más de prácticas y estudios, y no se les haga contratos en cuanto acaban.

¿Por qué se da esta inestabilidad?

Porque una parte de las plazas no se consolidan y, por otra parte, con la preparación que se tiene se puede optar a trabajar también como administrativo del Gobierno Vasco o un Ayuntamiento. Y está habiendo fugas hacia estos lugares. La gente quiere ir donde las condiciones son mejores. Si al menos se les diera un mayor reconocimiento… Premiar a la gente para que se forme, adecuar la situación para que sean administrativos sanitarios y luego, por supuesto, cada persona es libre de elegir su trabajo.

Si faltan trabajadores, no sé cómo no puede haber estabilidad

Sería menos difícil trabajar en grupos de trabajadores estables que se conozcan, pero ahora a los eventuales se les mueve muchísimo para que ocupen varias vacantes. Eso es pan para hoy y hambre para mañana: la calidad del trabajo es peor y la satisfacción y estrés del trabajador empeora.

"Sería menos difícil trabajar en grupos de trabajadores estables, pero a los eventuales se les mueve muchísimo para cubrir varias vacantes"

Esto no ha surgido de golpe, ¿verdad?

Nuestra asociación se creó en 2017, pero no porque se viese mal la organización ese año, sino que veíamos que en los últimos años ya iba mal. Y fíjate con qué fuerza surgió. Y luego, nos hemos olvidado que fue muy duro lo del covid, y hay que ver cómo ha quedado la salud mental de la población.

¿Acuden muchos con problemas de salud mental?

Se ve muy claramente un aumento. Y como trabajo en un Punto de Atención Continuada (PAC), de repente, se presenta a cualquier hora gente, sobre todo de noche, con problemas de soledad y salud mental que hay que ver cómo vienen los pobres. Y creo que Osakidetza es una institución que tiene que garantizar que todos estemos cuidados.

Habla de falta de médicos. ¿Existe la sensación de que es más un médico de hospital que uno de Atención Primaria?

Yo no quiero marcar esas distancias entre los médicos de hospital y de atención primaria, pero desde la Administración creo que han hecho una diferenciación clara y una valoración distinta y por eso estamos como estamos. Antes he dicho, se han quedado 300 personas se han quedado sin elegir la especialidad de médico de familia. Cuando salen, prefieren trabajar en Urgencias de un hospital, en ambulancias, prefieren cualquier lugar antes que un centro de salud. Yo creo que eso lo dice todo.

Y se ha visto en la encuesta sobre el burn out.

En ese estudio, choca que muchos profesionales ya casi tienen miedo a ir al trabajo, porque tú allí ves que las personas tienen unas necesidades, que están nerviosas y no puedes llegar. Sales con la sensación de que no has hecho el trabajo como deberías.

¿Y cómo se arregla eso?

Para arreglarlo, nos piden hacer más horas extras, pero las personas ya están cansadas. Dicen que lo premiarán con dinero. Eso puede valer para un momento puntual, pero no es sostenible en el tiempo. Además de trabajadores, nosotros en otro momento también somos pacientes, y todos tenemos familia, y nos gustaría ver que el sistema está en marcha y bien, pero no lo vemos.