La Real ha efectuado este miércoles el sorteo para las entradas el partido entre el Benfica y el conjunto realista, que se disputará en Lisboa el próximo 24 de octubre a las 21:00 horas (una hora menos en Portugal). Todo apunta a que este desplazamiento será el viaje masivo a tenor de las solicitudes que ha recibido el club de Anoeta, por encima de las 5.000 peticiones para un aforo visitante de 3.250 personas.
Del aforo del estadio lisboeta, un total de 65.000 espectadores, al equipo visitante le corresponde el 5% de las localidades, con un precio de venta máximo de 70 euros. Pues bien, la Real recibirá 3.250 entradas, de las que se reserva 400 para sus propios compromisos (300 para el viaje que organiza la agencia Halcón y otras 100 para peñas). Previsto el sorteo para este martes, al final ha sido este miércoles una vez el club realista ha terminado de cribar las peticiones, al encontrar que había solicitudes duplicadas. Al final han sido 5.138 personas las que han mostrado interés en acudir a la capital portuguesa para ver a la Real, 3.237 como solicitantes y 1.901 como acompañantes.
A partir de ahí son 2.850 entradas a 40 euros cada una las que los abonados de la Real y sus acompañantes se repartirán para un duelo que se antoja decisivo, más que por el equipo de Imanol, por las dos derrotas que ya acumula un Benfica obligado a ganar para alcanzar su objetivo de pasar a los octavos de final. Con estos datos, han sido 2.200 las peticiones que el club realista no ha podido atender.
El club explica en su comunicado que los solicitantes de las entradas que han sido agraciados recibirán un mail esta tarde y el martes 10 de octubre deberán acudir a la taquilla del estadio de Anoeta entre las 10:00 horas y las 20:00 horas para pagar las entradas. Los tiques, en soporte digital, se enviarán más adelante.
El sorteo ha llegado horas después de la dulce victoria de la Real en Salzburgo, un destino conocido por la afición realista tras el viaje de 2018. En esta ocasión, han sido medio millar los realistas que acompañaron al equipo, lejos de cubrir las 1.500 plazas que tenía el club a su disposición.
En Lisboa no sucederá nada parecido. Es más, en el duelo inaugural contra el equipo austríaco, el Estadio da Luz registró 60.917 asistentes, lo que significa que las localidades disponibles para la hinchada local se ocuparon casi todas y que, a diferencia de otros destinos en años anteriores, el equipo portugués no facilitará más papel.
A expensas de lo que suceda en las dos próximas jornadas de la fase de grupos, en las que el equipo de Imanol Alguacil vivirá un enfrentamiento decisivo contra el Benfica (la vuelta, en Anoeta), se puede anticipar una destacada presencia de aficionados realistas en San Siro, uno de los grandes coliseos del fútbol continental.
Salvo que la Real acumule tres derrotas consecutivas y los resultados no le sean nada favorables, el triunfo de Salzburgo le permite llegar a la última jornada en Milán con algo en juego: o asegurar el billete para la tercera plaza… o el billete a los octavos de final de la Champions.
