La Real dispondrá de al menos el 5% de las entradas de cada estadio que visite en la Fase de Grupos de la Champions League, los del Benfica, Inter y Salzburgo. Una norma de la UEFA de obligado cumplimiento, tal y como lo estipula el documento de Regulaciones de la Champions League en su última edición, de junio de 2023, y que fija en un máximo de 70 euros el precio de las entradas.

“Los clubes locales deben poner al menos el 5% de la capacidad total aprobada por la UEFA de su estadio a disposición exclusiva de los aficionados visitantes, en un área segregada y segura”, reza su artículo 38, que ante posibles abusos especifica que el precio de venta “no debe exceder el precio pagado por las entradas de adultos en un sector comparable del estadio que se venden a los seguidores del equipo local”, siempre con un tope máximo de 70 euros.

Al margen de estas entradas del 5% de la capacidad, los clubes visitantes “tienen derecho a comprar 200 entradas de primera categoría para sus seguidores VIP, patrocinadores, etc.”.

La venta de estas entradas corre a cargo del club visitante, en este caso, la Real, que deberá emitirlas por sectores, de manera que si hay entradas no vendidas, esos sectores sin ocupar se pueden devolver al equipo local. Los clubes tienen de plazo hasta 7 días antes para ejecutar esa devolución, y en caso de que no lo hagan, deberán pagar los asientos asignados, hayan o no vendido a su afición.

Las entradas sobrantes pueden salir a la venta en la ciudad de origen, con una norma clara: “Siempre que se respeten todas las medidas de seguridad y que dichas entradas no se reasignen a los seguidores del club visitante”.

Para evitar sustos y descortesías en según qué campos, la UEFA obliga a todos los clubes a que los representantes de la propia Federación Europea y “al menos 20 representantes del club visitante” cuenten con “asientos de primera categoría de cortesía (y la hospitalidad asociada) en el sector VIP”.

Las Regulaciones de la UEFA establecen que todos estos puntos pueden ser modificados por acuerdo escrito de ambos clubes, “excepto aquellos relacionados con el límite de precio de las entradas para los aficionados visitantes”. En el caso de destinar menos del 5% del aforo a la afición visitante, “solo debería acordarse si existe una falta específica de demanda por parte de los aficionados del equipo visitante para el partido en cuestión”.

En cuanto a las capacidades, las entradas que dispondrá la Real oscilarán aproximadamente entre las 1.500 de Salzburgo y las 4.000 de Milán, con las 3.250 de Lisboa.

Unos 2.000 visitantes en Anoeta

De la misma manera, al menos el 5% del estadio de Anoeta se destinará a la afición visitante (Benfica, Inter y Salzburgo), sea capaz o no de agotar dichas localidades. Con alrededor de 40.000 asientos en el estadio de Amara (que en ocasiones como la Champions se suelen ver reducidos por la ampliación de zonas de palcos, etc.), se espera que la Real deba destinar unas 2.000 localidades para los tres equipos visitantes.