Hubo un tiempo no muy lejano durante el que Real Sociedad, Athletic, Osasuna, Alavés y Eibar coincidieron en Primera División, completando el 25% del cupo de equipos en la máxima categoría. Atendiendo a tal circunstancia, puede situarse en esas tres temporadas (2016-17, 2019-20 y 2020-21) una especie de edad de oro del balompié vasco, un fútbol cuya salud continúa resultando notable. Al fin y al cabo, armeros y albiazules luchan en Segunda por regresar a la élite, con garantías de poder conseguirlo. Y las prestaciones recientes de txuri-urdin, rojillos y vizcainos también son muy positivas. El propio Osasuna jugará el próximo 6 de mayo la final de la Copa del Rey, la segunda de su historia tras la perdida en 2005 contra el Betis. Y, por su parte, Athletic y Real se miden este sábado (16.15 horas) en San Mamés con motivo de un derbi de tintes eminentemente europeos. Los de Imanol y los de Valverde buscan acercarse al logro de sus respectivos billetes continentales, pasaportes que solo han sellado al unísono en cinco temporadas a lo largo de la historia.
Participaciones
Contando la protagonizada durante el presente curso, la Real Sociedad acumula 18 participaciones europeas. El Athletic, mientras, suma 30, excluyendo de la nómina la extinta Copa Latina y un breve concurso en la Copa Intertoto durante el verano de 2006. Puede afirmarse así que a txuri-urdin y rojiblancos no les resulta extraño pasear su escudo por el continente, aunque rara vez lo han hecho de forma simultánea. La primera ocasión en que esto se dio obliga a remontarse a la campaña 1982-83, cuando los guipuzcoanos jugaron la Copa de Europa y los vizcainos la UEFA. Ambas escuadras coincidieron en la propia UEFA en la temporada 1988-89. Y esto mismo sucedió en la actual Europa League durante el ejercicio 2017-18. En los cursos 1998-99 y 2014-15, finalmente, el Athletic compitió en la Liga de Campeones y la Real en UEFA o Europa League. Se completan así los cinco precedentes de coincidencia europea de ambos conjuntos.
Dos focos distintos
Sea como sea, los enfoques desde los que guipuzcoanos y vizcainos encaran el partido de este sábado resultan muy distintos. La Real pugna por una plaza de Champions, la que actualmente ocupa en la clasificación, y se halla inmersa en una pelea que nomina a Villarreal y Betis como principales rivales directos. Curiosamente, los amarillos reciben este mismo sábado al Valladolid (14.00 horas) justo antes del derbi, mientras los verdiblancos hacen lo propio con el Espanyol justo después (18.30). Los txuri-urdin aventajan en cuatro puntos al cuadro castellonense, en seis al andaluz y en once a un Athletic, séptimo, cuyo puesto actual depara incógnitas en cuanto a premio europeo: quien lo ocupe al final de la Liga solo disputará la Conference League si el Real Madrid gana la final de Copa contra Osasuna. En cualquier caso, los de Valverde, además de mirar por el retrovisor para distanciar a sus perseguidores, aprietan también el acelerador, pues con diez jornadas por delante están a tiempo de dar caza a algún equipo de la zona noble.
Complicada carambola
La buena situación de la Real, cuyo último partido ante el Getafe significó un repunte al alza en cuanto a sensaciones, y la buena dinámica futbolística del Athletic significan argumentos sólidos para creer en que ambos equipos coincidirán en Europa la próxima temporada, por sexta ocasión. Cabe resaltar, sin embargo, que el curso 2023-24 podría resultar histórico si Osasuna se sumara a la fiesta y completara un trío vasco en los torneos continentales. Para que esto sucediera debería darse una carambola compleja, que pasaría principalmente por que los rojillos se proclamaran campeones de la Copa del Rey (ganándole la final a todo un Real Madrid) y por que el propio Athletic consiguiera terminar la Liga entre los seis primeros clasificados. Hasta la fecha, los rojillos han competido en Europa en cuatro oportunidades, por las dos de un Alavés que pone punto final a la representación euskaldun en los torneos internacionales.
