Navarro de pura cepa. Pacheco no pierde la sonrisa ni la ambición para abordar todos los temas. Se le esperaba y ha llegado para ser un central de época. En esta parte de la entrevista analiza su definitivo aterrizaje en el primer equipo.

Hasta llegar al primer equipo, ha ido subiendo peldaños casi a la vez que le iban llamando selecciones inferiores

–Sí, he sido sub’17, sub’19, sub’20 y sub’21. Una gozada. Al final central zurdo igual ahora hay mas, pero antes no aparecían tantos y eso favorece y he ido poco a poco.

¿Cuándo pensó ‘esto va en serio’?

–Ya cuando estás en el Sanse. Yo en el filial todavía soy juvenil pero ves que el club apuesta por ti, que entrenas con el primer equipo y que vas a tener oportunidades. Hay que intentar aprovecharlas y nada más.

Ser zurdo abre muchas puertas...

–Creo que sí. Justo en nuestra posición la mayoría eran diestros y al final ser zurdo te da otra salida y te permite actuar en una posición más natural. Yo alguna vez que he jugado en el central derecho, con Yago en el Juvenil División de Honor, me ha costado. Creo que alguna vez hemos jugado todos zurdos atrás: Zoilo, Yago, Recio y yo. Yo no estaba acostumbrado. Un zurdo a la derecha es un poco raro.

Siempre sufren más porque lo normal es que haya un diestro.

–Es diferente. Robin me decía que para disputar él prefería saltar de izquierda con el pie de apoyo bueno, pero claro, después con el balón prefiere la derecha. Se cambia mucho, es raro. Parece una tontería, pero cambian cosas.

Rubén Pardo me dijo que es venía un central que le recordaba mucho a Iñigo Martinez.

–Me lo han dicho alguna vez, aunque cada vez menos (risas). Creo que fue el último zurdo que salió. Ojalá llegara a parecerme porque es un jugadorazo. Con Pardo coincidí muy poco, era más majo que la leche.

Apunto de asomar la cabeza en el primer equipo de repente le fichan a Sagnan...

–Al final el club siempre está buscando progresar. Mira dónde está hoy en día. Busca traer a lo mejor y si en ese momento decidieron eso sería por algo sería.

¿Le comentaron algo porque sus características son similares?

–Que estuviese tranquilo que también iba a tener oportunidades y que siguiese a lo mío y haciendo lo mío. Al final es competencia, pero competencia sana, y eso también te viene bien para mejorar y espabilar

“Cuando ficharon a Sagnan me dijeron que estuviese tranquilo, que iba a tener oportunidades; a todos nos viene bien la competencia”

Bueno, debuta en Getafe en defensa de cinco y con una gran actuación, con lesión incluida.

–Fue muy rápido todo, ya ni me acuerdo. No sé qué fue, creo que una acción en la que me tiro al suelo, se me queda un poco la pierna y me hago un poco de daño y me cambió. Hoy en día no hubiese pedido el cambio tan fácil (risas). Pero por la situación, al final, parece como que todo te pesa más, te cansas más y todo va sumando.

Después se pasa casi un año sin ser titular en Liga.

–Tampoco pasé muy buena época. Justo me lesioné, sufrí una fisura en el quito metatarsiano, luego me rompí... Me tiré mucho tiempo lesionado. Si no estás entrenando es difícil que juegues y me tocó remar y trabajar.

Después encadenó cuatro titularidades seguidas, Bernabéu incluido

–Fueron partidos entre semana, todo muy rápido. Venía de no jugar a de repente estar dos, tres, cuatro partidos jugando... Fue extraño. Pero bueno, en el Bernabéu empezamos muy bien aunque luego nos metieron dos golazos y se torció el partido.

Dicen que la primera vez te impacta cuando saltas al campo...

–Impresiona. Miras y eso que justo estaba en obras y había lonas, pero impone mucho.

Imanol le dio un buen palo en la sala de prensa: “Con un 50% de disputas ganadas lo tiene crudo en Primera”.

–Ya me lo había dicho a mí antes. Mas que un palo, solo eran estadísticas. Tenía razón, dijo un dato que era real, no era ninguna mentira. Tocaba apretar y seguir apretando para ganar más del 50% como hago ahora. Hoy en día te controlan todo (risas).

“Me han comentado más de una vez que les recuerdo a Iñigo Martínez; ojalá me parezca más porque es un jugadorazo”

Pero no juega más hasta el duelo contra el Cádiz varias semanas después..

–Son situaciones de juego. El equipo ya se estaba jugando más y es normal que tires a lo más veterano o lo mas seguro.

En esta campaña tampoco entraba en las quinielas para ser titular.

–Tocaba seguir trabajando. En la pretemporada tuve momentos buenos y no tan buenos y me centraba en seguir esforzándome.

Hasta que llega su gran noche de Old Trafford.

–Se lesionó Robin. Pensaba que jugaría Igor, pero soy zurdo y quizá era más natural. Es verdad que me entero el mismo día. Teníamos la alineación y justo mos enteramos de lo de la reina y que igual se suspendía. Joder, ahora que voy a jugar titular, igual se suspende (risas). Pero bueno, al final salió todo bien.

Todos los futbolistas viven un día de su consagración

–Tampoco te creas, fallé más pases que nunca, tenía nervios... Yo mismo al descanso ya sabía que no estaba dando un pase bueno y que tenía que corregirlo. Pero es verdad que fue un momento bonito y esperemos que haya más noches como esas.

¿Qué tal le fue con Cristiano?

–Bien. Iba a su bola. Es un competidor nato, corregía a los suyos y nada más. Al final con todo lo que ha sido, ahora está algo mayor, pero sigue siendo Cristiano así que tocaba darlo todo.

Ya nadie duda de sus posibilidades ni de sus titularidades.

–Sí que he tenido más minutos y todo suma. Al final es salir y hacerlo bien. Si no estás jugando es difícil. Creo que desde ese partido sí que se puede confiar algo más. Encima mi estilo es que a veces me la juego y es normal que Imanol dude. Es un privilegio estar ahí.

En el descanso de Old Trafford ya sabía que no estaba dando un pase bueno y que tenía que corregirlo; pero es verdad que fue un momento bonito y esperemos vivir más noches como esas.

¿En qué ha mejorado?

–En el estar más concentrado, que tengo que seguir mejorando mogollón, porque siempre he tenido despistes. Y hacerte a la competición. Según vas jugando te vas haciendo. En Segunda B también me pasó, que al subir estaba más verde en las disputas y tal. Según vas cogiendo minutos te vas haciendo y todavía lo que me queda por mejorar. No sé si muchos más, pero algo más del 50% del duelo ya ganaré (risas). Va por días, hay días que ganas todas y otros que no ganas una.

Pero el tema de los datos, ¿cómo va, Imanol o el analista llega con una lista de números preparada?

–Eso la prensa, que le calentáis a Imanol (risas). Es verdad que yo mismo me fijo en qué tengo que mejorar, pero no te viene nadie con una libreta.

¿Qué le queda por mejorar?

–Seguir cogiendo fuerza, hacerme un central más fuerte, pero ese es el trabajo de gimnasio que hay que hacer fuera. Dentro del campo cualquier cosa: salida de balón, defensivamente seguir siendo ganador, basculaciones...

Con su altura, su juego aéreo y su golpeo algún golito ya marcará...

–Espero joder. Es otro aspecto que ojalá mejore y pueda dar más alegrías, anotar goles y celebrar.