La Real Sociedad ha caído este lunes en el quinto partido post-desconfinamiento, una etapa en la que no conoce la victoria y en la que con un punto de quince posibles se empeña en evaporar por la vía rápida la clasificación europea merecida en las 27 jornadas anteriores. Pese a su buen arranque en el Coliseum Alfonso Pérez, la Real Sociedad ha encajado en el minuto 19 un gol de Mata de penalti, el séptimo en contra que sufre el equipo realista en otras tantas jornadas, después de que Remiro cometiera un error en la salida de balón y provocara una mala entrega de la que se benefició el local Hugo Duro, objeto del penal de Le Normand.

Una nueva pena máxima inexistente, que Cordero Vega ha pitado pese a que el pisotón inicial es del propio Duro sobre el central galo. Ni el propio colegiado ni el VAR han rectificado una decisión que ha roto la igualdad en el marcador y que sitúa en desventaja a un equipo realista que, a los puntos, presentaba mejores prestaciones que el equipo local.

A los pocos minutos de regresar del descanso, un pase milimétrico sobre Januzaj ha acabado en gol, aunque el árbitro ha anulado en primera instancia. No obstante, esta vez el VAR ha validado la acción del belga, el mejor futbolista blanquiazul desde la vuelta a la actividad, y la Real ha conseguido empatar la contienda en el minuto 56.

Minutos después, cuando Imanol ha dispuesto a los suyos al ataque incluso recuperando el sistema habitual, una jugada aislada local ha supuesto el 2-1 en un inocente saque de banda que Jorge Molina ha sacado con rapidez ante la pasividad realista, Mata se ha desecho de Aritz y con un ligero remate ha batido por bajo a Remiro en su segundo tanto de la noche.

Con esta derrota, la cuarta en las últimas semanas de competición, la Real cierra la 32ª jornada séptima, a siete puntos del cuarto puesto en el que arrancó junio e incluso a cuatro puntos del sexto que hoy evitaría las previas de la Europa League. El próximo choque de los de Imanol será el jueves a las 19:30 horas en Anoeta, ante el colista Espanyol, al que diez puntos le separan de la salvación.