DONOSTIA. El oscurantismo que maneja la Real desde su llegada provoca situaciones que no parecen beneficiar demasiado a David Moyes. El club optó por esconder que Markel Bergara estaba lesionado, por lo que no entró en la convocatoria que se dio a conocer una hora antes del comienzo del derbi.
Como ya publicó este periódico el pasado viernes, Markel se retiró del entrenamiento vespertino al sentir unas molestias en la parte alta del muslo que, al menos en el primer momento, no parecían revestir exce-
siva gravedad. Al día siguiente se presentó en Zubieta con dolores, lo que provocó que le hicieran unas pruebas que le descartaron para ser de la partida.
Esto provocó que muchas personas, este periódico incluido, criticaran el hecho de que no hubiese un centrocampista en el banquillo para protegerse en caso de que se produjera algún contratiempo, como pudo
pasar después de que Illarramendi y Pardo fueran los primeros blanquiazules en ser amonestados. No
fue hasta el día de ayer cuando el club, que ya ha dejado de publicar partes médicos desde el aterrizaje
de Moyes, confirmó que había sido baja médica.
En este mismo escenario se encuentra el extraño caso de Joseba Zaldua. El donostiarra se lesionó después del estreno liguero ante el Deportivo y no ha vuelto a jugar más. En la semana de la visita al Betis volvió a trabajar con el grupo e incluso compareció en la sala de prensa, donde declaró que si no surgía nada extraño iba a poder entrar en la lista. Después no viajó y en el primer entrenamiento pospartido ya trabajó al margen del grupo junto al también lesionado Iñigo Mar-tínez. Pues bien, el lateral sigue sin reaparecer ni ser convocado mien-tras nadie del club concreta lo que realmente tiene. El mensaje es que arrastra unas molestias musculares. Tampoco estará para este encuentro y se confía en que tras el parón, tanto él como Carlos Martínez reciban el alta competitiva para poder jugar frente al Atlético.
En cambio, el que no está descartado para el partido del próximo sábado es Esteban Granero. El madrileño tuvo que pedir el cambio en Granada al sentir un pinchazo, pero ha mejorado bastante y lo más probable es que viaje y hasta pueda jugar en La Rosaleda, ya que Pardo, que también está tocado, no brilló en el derbi.