REAL SOCIEDAD Cornejo, Manterola (Enciso, m. 58), Aizpurua, Gabirondo, Ramajo, Lucas, Lizaso, Uriarte (Del Ama, m. 46), Garmendia (Encinas, m. 46), Herrero (Peña, m. 78) y Zelaia.

COLLERENSE Andrea, Sus, Laurita, Anita (Mariona, m. 60), Rosita, Antonia, Patri, Laura (Capo, m. 75), Tania, Vidal y Marga.

Goles 0-1, m. 47: Patri. 1-1, m. 51: Ramajo. 2-1, m. 86: Lucas.

Árbitro Etxarri. Amonestó al jugadora de la Real Sociedad Ramajo; y a Laurita y Rosita del Collerense.

Estadio Alrededor de 800 personas en Zubieta.

DONOSTIA. Pocas veces sabrá una victoria tan bien como la lograda ayer por la Real Sociedad. Las guipuzcoanas sufrieron más de lo debido ante el Collerense e incluso tuvieron que remontar un gol encajado nada más comenzar la segunda mitad. El esfuerzo mereció la pena y la sensación que quedó en Zubieta es que los tres puntos valen el doble. Y eso que el rival no parecía de los más peligrosos, pero en la máxima categoría del fútbol femenino no hay enemigo pequeño, como demostró ayer el Collerense.

Las de José Manuel Etxabe comenzaron con intensidad el partido, imprimiéndole el ritmo y juego que ellas deseaban y logrando llegar a las cercanías del área visitante con asiduidad. El balón, sin embargo, se resistía a cruzar los últimos metros y las jugadoras visitantes comenzaron a crecerse al verse aún vivas. Cornejo evitó, en la única jugada de peligro del Collerense, que las visitantes se fueran al descanso con el marcador a su favor, lo que hubiera sido a todas luces injusto.

Una injusticia que se convertiría en realidad nada más comenzar la segunda parte. Antes, en la primera jugada tras el saque, Herrero realizó un disparo cruzado que obligó a Andrea a realizar una buena estirada. Dos minutos más tarde el Collerense se adelantó en una contra que culminó a la perfección Patri. El gol despertó a la fiera y la Real empató enseguida. Lucas sacó un córner que remató Lizaso, el balón se dirigió al segundo palo y allí Ramajo la empujó al fondo de la red. Las txuri-urdin siguieron empujando, pero el balón seguía resistiéndose a entrar. A falta de 10 minutos las donostiarras reclamaron penalti en un empujón y derribo a Peña dentro del área que el colegiado no vio. Los minutos pasaban inexorables y la Real Sociedad seguía sufriendo en busca de un gol que les diera la victoria. Cuando el tiempo ya acuciaba el tanto llegó gracias a la diosa fortuna. Lucas sacó una falta lejana y Andrea, que no midió bien, acabó comiéndose el balón.