Osasuna recibe este miércoles a la Real, en los octavos de final de la Copa (21:00 horas), a partido único, con el calor de su afición y la motivación de volver a ilusionarse con una competición que el pasado curso desató pasiones en El Sadar y que también gusta especialmente al técnico realista Imanol Alguacil.
El conjunto pamplonés deberá cambiar su chip tras la amarga eliminación de la Supercopa de España en Riad ante el Barcelona. Ahora tiene una excelente oportunidad delante de su afición para volver a ser protagonista copero y luchar por, al menos, repetir la final del pasado año.
Osasuna vuelve a la carga en la Copa del Rey, un torneo del que la hinchada navarra guarda un grato recuerdo. La mística alcanzada el curso pasado con las múltiples prórrogas ganadas, goles para la historia y emocionantes choques en El Sadar hacen que la de este miércoles sea una cita de notable relevancia.
“Creo que ahora mismo estamos como para intentar mañana esa hazaña de ganar a la Real y pasar a cuartos. No sentimos capacitados como para ganar”, ha indicado un Arrasate.
Las sensaciones en Pamplona han mejorado respecto a hace varias semanas. Aunque el equipo todavía no ha alcanzado su mejor versión, el viaje a Arabia sirvió para ver brotes de buen juego junto a una estructura defensiva que funcionó.
Arrasate irá con todo. El Getafe visita el domingo El Sadar, algo que no influirá en el once que el técnico de Berriatua ponga. Un once similar al de Riad ante el Barcelona será el elegido, que puede estar compuesto por Aitor Fernández; Areso, Catena, David García, Juan Cruz; Torró; Moncayola, Aimar, Moi Gómez, Peña; y Budimir.
