Alstom ha decidido centralizar en su sede francesa las actividades de Bélgica y Luxemburgo y prescindir del director de la compañía en el país belga, Bernard Belvaux, según informa el diario L’Echo, que apunta a que esta decisión se encuentra relacionada con la designación por parte del operador SNCB de CAF como socio preferente en el considerado “Contrato del Siglo” que contempla el suministro de trenes por valor de 1.695 millones de euros, ampliable hasta los 3.400 millones, ante la que Alstom interpuso dos recursos que fueron desestimados.

El traslado de la gestión de los proyectos belgas y luxemburgueses de Alstom a Francia plantea como interrogante su impacto en los centros de la compañía ferroviaria gala en Bélgica. En Charleroi dispone de un centro de conocimiento donde trabajan alrededor de 1.100 profesionales y muy cerca de esta localidad, en Fleurus, una planta de mantenimiento y reposición dirigida en exclusiva al tranvía de Charleroi.

Incertidumbre en Brujas

Sin embargo, es en Brujas donde se agudiza la incertidumbre. En esta localidad belga tiene una planta productiva con una plantilla de aproximadamente 800 personas que en la actualidad fabrica vagones M7 de dos pisos destinados a la red interurbana de Bélgica en virtud de un contrato firmado con el operador SNCB que expira en abril del próximo año. De no obtener más pedidos, tal y como advirtió el propio Alstom, se vería obligada a cerrar. Este argumento fue utilizado por la compañía ferroviaria gala durante el proceso en el que el Consejo de Estado belga debía decidir si la designación de CAF era conforme a derecho.

Trabajadores de Alstom. Redaccion NdG

El traslado a Francia de la gestión de los centros de Bélgica y Luxemburgo se ha visto acompañado de la destitución del director de Alstom en el país belga, Bernard Belvaux, quien calificó la decisión de SNCB como “impactante” en una carta enviada a los partidos políticos belgas en la que advertía de las consecuencias de no conseguir el “Contrato del Siglo”. La polémica surgió cuando se conoció la designación de CAF como socio preferente por parte de SNCB, lo que fue recurrido por Alstom y Siemens, aunque este primero fue más beligerante.

La compañía ferroviaria francesa consideró que en la valoración no se tuvo en cuenta la creación de empleo local y que su oferta era 107 millones más barata que la de CAF, a lo que la SNCB respondió que, en primer lugar, al ser una licitación europea el factor empleo no tenía por qué contemplarse, mientras que en lo relativo al precio, la oferta de la empresa de Beasain era mejor teniendo en cuenta la calidad de las prestaciones.

Nuevo recurso

Esta contestación no contentó a Alstom, que interpuso un recurso y dio inicio a un proceso en el que tanto partidos políticos como sindicatos belgas mostraron su oposición a la adjudicación a CAF. En una primera sesión, el Consejo de Estado de Bélgica, similar a un tribunal de lo contencioso-administrativo, pidió a SNCB que fuera más transparente en los pliegos de adjudicación y finalmente aceptó su decisión. Alstom volvió a recurrirlo, y el Consejo de Estado se reafirmó en su posición, por lo que SNCB y CAF se encuentran en la actualidad acordando los términos del contrato.

Los cambios acordados en Alstom coinciden con la resolución de su Consejo de Administración de nombrar consejero delegado de la compañía a Martin Sion, en sustitución de Henri Poupart-Lafarge que anunció su deseo de abandonar el cargo. El relevo se hará efectivo el 1 de abril del próximo año.