Dürr Systems Spain, con sede en Donostia, construirá una nueva planta de pintura energéticamente eficiente para Stellantis, el fabricante automovilístico de reconocidas marcas como Peugeot, Citröen y Fiat que pretende con este encargo duplicar la productividad de su fábrica del noroeste de Marruecos y ahorrar costes y tiempo gracias a la tecnología implantada por la filial en Gipuzkoa del grupo alemán.
Dürr se dedica al diseño y construcción de sistemas y productos de pintura para diversos sectores como la automoción, la aeronáutica o el sector ferroviario y el encargo recibido por Stellantis es la creación de un taller de pintura “llave en mano” que incorpora un elevado número de sistemas que abundan en la eficiencia energética, con la intención de incrementar la competitividad del grupo automovilístico en un momento poco propicio para el sector.
Optimización energética
El taller de pintura diseñado para la planta de Kenitra “pretende ser un modelo de optimización energética y, al mismo tiempo, aumentar significativamente la capacidad de producción de Stellantis”, afirma Dürr, para añadir que una de las medidas que contribuirá a este objetivo se encuentra al inicio del proceso, en el momento de la inmersión de la carrocería, con una solución técnica que reduce el consumo de agua, productos químicos y energía calorífica, lo que reduce los costes operativos y unitarios.
Tras este tratamiento, los coches pasan a un horno eléctrico y en este paso Dürr emplea uno que disminuye el calentamiento de la carrocería un 30% y funciona con energía verde, lo que elimina la dependencia de los combustibles fósiles. La combinación de ambos factores permite reducir un 40% las emisiones del taller de pintura y su huella de carbono.
Reutilización
Otra de las propuestas eficientes que promoverá la filial donostiarra del grupo alemán es la reutilización. Según explica, las unidades de suministro de aire, los calentadores y los transportadores han sido trasladados de Europa a Marruecos, lo que fomenta la sostenibilidad, afirma. “La reutilización es una herramienta adecuada para construir una planta de pintura dentro de las exigentes limitaciones marcadas por el tiempo y los costes”, señala Dürr, quien matiza que “todo ello sin renunciar a la calidad de recubrimiento ni las prestaciones”. Las previsiones apuntan a que este taller tendrá capacidad para procesar un total de 30 carrocerías por hora.