La antigua sede de Fagor Electrodomésticos en Arrasate vuelve a recuperar su carácter industrial siete años después de la mano de otra cooperativa del Grupo Mondragon. Dikar, fabricante de armas de caza deportiva, ha inaugurado hoy una nueva planta de producción en Garagartza con la que también inicia una nueva etapa marcada por la intensificación de su actividad innovadora con el objetivo de mantenerse entre las firmas referentes de este sector en el ámbito internacional.

"Inauguramos una nueva etapa caracterizada por la fusión de la innovación y del saber hacer"

Esther Korta - Directora general de Dikar

Su directora general, Esther Korta, ha presidido el acto de presentación de esta nueva planta que ha contado con la presencia del presidente del Grupo Mondragon, Iñigo Ucín; la delegada del Gobierno central en Euskadi, Marisol Garmendia; y la directora de la Cámara de Comercio de España, Inmaculada Riera i Reñé, quienes han compartido la visita a las instalaciones con representantes de la red de comerciales de la cooperativa guipuzcoana en todo el mundo y con sus distribuidores estadounidenses.

Un símbolo

Korta ha mostrado su satisfacción por devolver el pulso industrial a un polígono que, tras la doble quiebra en pocos años de Fagor Electrodomésticos, corría el peligro de perder su carácter simbólico en Arrasate. El proyecto de recuperación de estos terrenos llegó en 2019 con la entrada de Pulsar Krean, una consultora de reciente constitución perteneciente a la alianza cooperativa que anunció entonces su intención de crear en este icónico emplazamiento un parque empresarial de alrededor de 100.000 metros cuadrados con naves para actividades industriales y espacios para oficinas.

Montaje del parque empresarial de Garagartza en Arrasate. Redaccion NdG

Dikar ha sido el primer negocio en recoger el guante e instalarse en este nuevo polígono con una planta “moderna e innovadora”, según subrayó su directora general, que inicia una etapa denominada Reload. Korta explicó que este término, que puede traducirse como recargar, hace un guiño a la actividad principal de la empresa fabricante de armas de caza deportiva pero también “es una manera de inspirar para superar nuevos retos”.

Búsqueda de la excelencia

En una superficie de 26.000 metros cuadrados, la cooperativa se centrará en “buscar la excelencia a través de la fusión de la innovación y del saber hacer” con el objetivo de mantenerse entre los mejores a nivel internacional, donde se sitúan competidores que son “marcas legendarias” a las que Dikar se equipara. En la actualidad, la cooperativa guipuzcoana tiene una plantilla de 400 personas distribuidas en sus cuatro sedes de Arrasate, Estados Unidos, Portugal y Francia que han impulsado el crecimiento de esta empresa fabricante y distribuidora de marcas como Bergara, CVA, Quake, Powerbelt, Durasight y Columbus.

En el acto de presentación, Iñigo Ucín ha valorado la apuesta de Dikar, que “ha recuperado una planta de enorme simbolismo y ha construido una instalación moderna, con tecnología punta que generará riqueza en el entorno”. Precisamente este compromiso con el arraigo es uno de los rasgos que Esther Korta ha destacado de la cooperativa y del movimiento en conjunto, como también lo ha hecho Marisol Garmendia, quien les ha felicitado por “haber sido capaces de poner este gran proyecto en marcha con instalaciones de alto valor tecnológico”.

Ejemplo industrial

Por su parte, Inmaculada Riera y Reñé ha considerado a la cooperativa guipuzcoana un ejemplo del sector industrial y ha subrayado “su excelencia, su capacidad de innovación, su compromiso y su proyecto internacional”. A este respecto, el responsable de la marca en Estados Unidos Guillermo Martínez ha valorado que las nuevas instalaciones disponen de mayor capacidad de producción, de tal manera que si bien antes algunas piezas se fabricaban fuera, ahora todo está centralizado en Arrasate por lo que “el rifle que hacíamos en tres meses ahora lo tendremos en 15 días”.