DONOSTIA - La prueba clasificatoria de la Bandera de la Concha femenina, que se disputa mañana, no es ajena a la crisis sanitaria del coronavirus, ya que dos de sus embarcaciones, Larrun Kosta y Deusto, no podrán bogar este miércoles por haber registrado positivos en sus filas.

El último en autodescartarse ha sido Larrun Kosta, el club de Lapurdi creado hace tres años, ya que dos de sus remeras estaban afectadas por la covid-19 y por precaución han decidido no acudir a esta cita.

Ayer se conoció también un caso similar, en este caso de una remera de la trainera de Deusto, que se vio obligada también a no presentarse a la jornada de clasificación que tendrá lugar en la bahía de La Concha.

La organización ha rediseñado las tandas que quedan ahora con trece traineras en pugna por siete plazas, a las que se sumará el domingo la embarcación Donostiarra, ya clasificada por estatutos, para disputarse el gran premio del verano en el remo Cantábrico.