Puente Genil es tierra de membrillo. Una de las zonas de gran producción en donde cuentan con un equipo de balonmano desde hace mucho tiempo. En los prolegómenos del encuentro homenajearon a unos cuantos pioneros de ese deporte en la ciudad. Les hubiera gustado rematar el acto con un triunfo ante el Bidasoa, pero los irundarras no concedieron la menor oportunidad para ello. Victoria incontestable de los de Artaleku (29-36).

Las características del pabellón local, con la cercanía del público como valor añadido, convierten al Miguel Salas en una cancha complicada. Los cordobeses obtienen muchos réditos de ese clima y una buena cantidad de los puntos que suben a su casillero provienen de tal atmósfera. Bidasoa, que ya ha probado más de una vez de esa medicina, conocía de sobra por dónde alcanzar el objetivo. Del mismo modo que, si se dejaba dominar por el entorno, tenía fiesta. Paco Bustos, el técnico local, no estaba muy seguro del papel de los suyos, después de una contundente derrota en la cancha del Anaitasuna. Cuétara apelaba en la previa al nivel del equipo, a ofrecer su mejor versión.

Después del primer acto, el Bidasoa llegó al descanso con dos tantos de diferencia (15-17), la mitad de la mejor renta de la que dispuso (5-9). Los irundarras salieron enchufados al partido y abrieron la primera brecha (0-3) tras los dos goles de Kauldi Odriozola y uno de Jon Azkue que protagonizaron un excelente encuentro. Los de Cuétara se movían a favor de corriente, porque los pontanos aunque fueron recortando la diferencia no cuajaban como su técnico pretendía. El carrusel de cambios y varios errores en el ataque guipuzcoano propiciaron que las cosas pintaran más grises.

Cuando el 10-11 subió al marcador, el técnico de Artaleku solicitó un tiempo muerto para oxigenar el mundo de las ideas ofensivas de sus hombres. Reacción inmediata, porque el equipo amarillo recuperó los cuatro tantos de ventaja (12-16) que no supo llevar hasta el intermedio. El juego de ataque local vivía de las aportaciones de Delcio Moreno y el pivote Javier García Rubio. Entre ambos se repartieron todos los goles de su equipo en los primeros diecisiete minutos de partido. En el tramo final de este periodo apareció Joao Pedro da Silva, hermano de Matheus, logrando dos tantos que apretaron el tanteo para dejar abiertas las incógnitas.

Algunas se despejaron pronto. La defensa irundarra consiguió frenar las acometidas locales y no perdonó ninguna de las acciones de ataque posicional o contraataque. Se tardó poco menos de diez minutos en pasar del 15-17 del intermedio al 16-24. Poco antes, Paco Bustos llamó a los suyos durante un minuto para tratar de que no se le cayera el equipo tal y como le sucedió el fin de semana pasado. Las cosas no le cambiaron mucho, porque los de Artaleku seguían con la velocidad de crucero y a los andaluces no les salía casi nada. El técnico decidió una doble defensa adelantada sobre laterales que el Bidasoa aprovechó para buscar pases al pivote en donde Ander Ugarte no fallaba una (5 de 5), ni el joven Julen Mujika, tampoco. Ausente Cavero por problemas en la espalda, el chaval dispuso de minutos para demostrar que es capaz de competir en una cancha sin facilidades.

El partido siguió su camino sin hogueras. Llegar, a falta de diez minutos para la conclusión, con un colchón de nueve tantos de ventaja era una situación idílica para los irundarras. Pese a ello, en este tramo final, una roja directa a Dariel García y las exclusiones de Rodrigo Salinas y Matheus añadieron un elemento más al decorado porque, pese a disponer de tanta superioridad de jugadores, no fueron capaces de apretar el tanteador, ni poner en aprietos el incontestable triunfo de los guipuzcoanos que disponen ahora de una semana de descanso. Las competiciones se detienen por los compromisos de las selecciones. Todo vendrá bien para recuperarse del trajín precedente y afrontar la siguiente aventura que pasa por los partidos contra Incarlopsa Cuenca y BM Granollers (Asobal) además de la visita del Toulouse a Artaleku (EHF European League).

DATOS DEL PARTIDO

(29) ÁNGEL XIMÉNEZ PUENTE GENIL (15+14): Alvaro de Hita; Delcio Moreno (5), José Cuenca (2), Javier García (7, 4 de p), Xavi Tua (2), Chen Pomeranz y Pere Arnau -equipo inicial- Michal Martin (ps), Alan Marcio (3), S. Corning, Joao da Silva (5), Mitic (3), David Estepa (2), A. Pineda y Cabello.

(36) BIDASOA IRUN (17+19):J.M. Sierra; Zabala (4), Kauldi Odriozola (7) , Rodrigo Salinas (2) , Tesoriere, Matheus da Silva y Víctor Rodríguez (1) -equipo inicial- X. Ledo (ps), Julen Aginagalde (1), Jon Azkue (10, 4 de p), Ander Ugarte (5), Leo Renaud, Dariel García (2), Adrián Fernández (1, de p)y Julen Mujika (3).

ÁRBITROS: Arcos Adeva y Luque Cabrejas (comité madrileño). Exclusiones de Xavi Tua, por los andaluces: Matheus, Tom Tesoriere, Julen Mujika, Rodrigo Salinas por los bidasotarras. Dariel García fue descalificado al mostrarle los árbitros una tarjeta roja en el tramo final de la contienda.

Marcador cada cinco minutos: 0-3, 4-7, 7-9, 10-11, 12-15, 15-17 (descanso), 16-22, 16-24, 19-27, 22-31, 25-32, 29-36

Incidencias: Pabellón Alcalde Miguel Salas, en torno a 500 espectadore