Donostia. La exhibición ofrecida en Badalona no puede quedar en nada. El Lagun Aro GBC debe hacer buena su victoria del pasado domingo ante el Joventut superando esta noche en Illumbe al Fuenlabrada (20.00 horas, ETB1) de Porfi Fisac y enlazando así, por primera vez en el curso, dos triunfos seguidos. Solo así logrará el equipo de Sito Alonso enderezar por fin su mal inicio liguero, que le ha hecho acumular un balance de 3-8 en el primer tercio de la competición, y estar un poco más tranquilo a partir de ahora.

El presidente, Gorka Ramoneda, dijo el miércoles que el equipo debe estar "más arriba" que su 15º puesto actual y, para ello, solo vale ganar hoy. El cupo de errores en Illumbe ya está más que completo. Cuatro derrotas en cinco partidos en casa, dos de ellas encajadas ante Obradoiro y Alicante, es un balance preocupante, que urge mejorar. Está muy bien que el Lagun Aro haya sido capaz de ganar a domicilio al CAI Zaragoza y al Joventut, pero todo el mundo es consciente de que hay que hacer de tu cancha un fortín para lograr los objetivos marcados, ya sea la permanencia o algo más.

El Fuenlabrada va a ser un rival exigente, como demuestra el hecho de que esté en puestos coperos con un balance positivo (6-5). El equipo del sur de Madrid ya tiene el sello competitivo que imprime Porfi Fisac a sus equipos, siempre difíciles de batir.

Tras irse de Donostia, el extécnico del GBC triunfó en Valladolid y ahora lo está haciendo muy bien en el Fuenla, al que por ahora tiene por encima de sus posibilidades teóricas. El tridente que maneja el equipo lo forman Gustavo Ayón (16,6 puntos y 8,8 rebotes), Leo Mainoldi y Kirk Penney, uno de los grandes tiradores de la competición. Junto a ellos están el donostiarra Jon Cortaberría, el mejor jugador guipuzcoano del momento, que será duda hasta última hora por un esguince de tobillo, y Sergio Sánchez, otro ex del Lagun Aro.

cerrar el rebote Para ganar, el primer mandamiento vuelve a ser cerrar el rebote defensivo, algo que al equipo le está costando muchísimo hacer y que ha supuesto varias derrotas muy duras. Lo hizo bien contra el Joventut y ganó. Esta vez Doblas, Betts, Adeleke, Panko y compañía tienen trabajo extra, porque Ayón es uno de los pívots más poderosos, si no el más, de toda la ACB.

Si logra minimizar el daño en el rebote y defiende con cierta intensidad, el Lagun Aro tiene mucho ganado porque en ataque los puntos suelen estar garantizados. Aquí el hombre clave es Baron. Cuando mete triples, el equipo de Sito multiplica sus prestaciones. Todo se dio perfecto en Badalona. El objetivo es repetir hoy.