El alcalde de Donostia, Eneko Goia; y la directora gerente del Instituto Autónomo de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (INVIED), María Ángeles Cano, han firmado este miércoles en el Salón de Recepciones del Ayuntamiento de Donostia las escrituras de la venta de los terrenos de los Cuarteles de Loiola, por parte del Ministerio de Defensa al Ayuntamiento donostiarra por 73,3 millones de euros; un acto que cierra capítulo, ahuyenta fantasmas y permitirá al Gobierno municipal la construcción de 1.700 viviendas en este espacio en el que actualmente se asientan los Cuarteles de Loiola, junto al río Urumea.
Los militares tienen cuatro años para abandonar las instalaciones, momento en el que se podrá comenzar el desarrollo urbanístico de la zona y la construcción de las viviendas.
Serán todas de promoción pública: un 40% será vivienda protegida, y el resto, vivienda tasada, con un precio que fijará el propio Ayuntamiento teniendo en cuenta los costes de construcción y desarrollo de la zona. Un precio ajustado a su coste efectivo, por decirlo de alguna manera.
Goia ha calificado esta firma como un “paso histórico para poder diseñar un nuevo ámbito de centralidad para la ciudad”. Y hacerlo en un momento en el que la vivienda es un “reto” social que preocupa a la ciudadanía y las instituciones.
También ha señalado que estas nuevas viviendas destinadas a los y las donostiarras, darán la oportunidad de establecer mejores conexiones y desarrollar proyectos con visión de ciudad en este ámbito.
El alcalde ha dicho que “desde este momento se pone el contador a cero” para"diseñar un nuevo ámbito de centralidad para la ciudad, un espacio que hasta ahora “estaba cerrado” para los donostiarras y que en el futuro “haremos accesible”.
Mejorarán las comunicaciones
El alcalde ha señalado que el desarrollo urbanístico de este espacio traerá consigo mejores comunicaciones y conexiones y permitirá habilitar nuevos servicios que no sólo podrán disfrutar los vecinos de Loiola y Txomin, sino toda la ciudad. Goia ha defendido un nuevo ámbito con visión y “equipamientos de ciudad, no de barrio”, y por tanto dirigidos a todos y todas las donostiarras.
También ha recordado que en los próximos cuatro años, hasta que se desocupen las instalaciones, el “Ayuntamiento trabajará en el diseño y planificación de este espacio que ahora es propiedad de Donostia, ha resaltado. El alcalde ha indicado que se convocará un “concurso internacional de ideas” y se darán los pasos necesarios para cambiar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para pñoder desarrollarlo.
Para ello, ha reconocido, “habrá que “buscar la colaboración interinstitucional”, especialmente “para promover la construcción de vivienda protegida” y “diseñar qué equipamientos vamos a poner ahí”. Pero ha insistido en su idea: “Equipamientos de ciudad, no de barrio”.
El alcalde ha reconocido que no hay nada concretado con el Gobierno Vasco, pero le consta que hay voluntad de colaboración para buscar un objetivo compartido como es el de la vivienda, un problema que ha afectado “históricamente” a la ciudad, pero que “está empeorando”.
“No nos desequilibra las cuentas”
El alcalde ha recordado que, en el momento de la firma, el Ayuntamiento ha pagado ya un cheque por el total del importe de la operación al Ministerio de Defensa, descontando los 5 millones de euros de fianza que ya se pusieron cuando se firmó el convenio en 2023.
Goia ha dicho que el Ayuntamiento tiene fondos para ejecutar esta operación, y los tiene porque “desde hace ya dos años aproximadamente hizo una operación de endeudamiento para hacer frente a este pago. No nos desequilibra las cuentas”, que están en “buen estado”, cumpliendo “todos los parámetros que debemos cumplir”, en cuanto a déficit y gasto, ha dicho.
Pero sí representa un “esfuerzo”, ha recalcado, porque “esta es una apuesta que queremos hacer. Y significa que hemos puesto el esfuerzo de los ciudadanos al servicio de ello”. El montante total de la operación se eleva a 73,3 millones de euros.
“Bide neketsua”
El alcalde ha tenido palabras de agradecimiento para varias personas que han trabajado y facilitado una operación que “nos ha llevado más tiempo del que desearíamos”. Y que ha sido dura y larga (“neketsua”, ha dicho en euskera).
El alcalde ha recordado que esta era “una aspiración de ciudad” en la que han participado varias corporaciones municipales, y ha querido agradecerles el esfuerzo y la implicación a todas ellas.
También ha mostrado su agradecimiento a la ministra de Defensa, Margarita Robles; su secretaria de Estado, Amparo Valcarce; y a la directora del INVIED, porque "gracias a ellas, en los últimos tiempos, ha sido una maravilla” cerrar una operación que ha tenido “muchos contratiempos y obstáculos".
También ha agradecido la labor de la concejala delegada de Urbanismo, Nekane Arzallus, y del "equipo técnico del Ayuntamiento”, donde “se ha trabajado muy intensamente desde muchos departamentos”.
Con esta firma se culmina un proceso largo y complejo que afianza la colaboración de las instituciones en beneficio de la ciudadanía
Goia también ha querido dar las gracias a título personal a Aitor Esteban, gracias a quien “pudimos empezar a soñar con esto”; y a “Maribel Vaquero, que cuando Aitor tuvo otros quehaceres”, tomó su relevo al frente l grupo del PNV en el Congreso español.
El futuro del Ejército en Donostia
Por su parte, la directora gerente del INVIED, María Ángeles Cano, ha señalado que “con esta firma se culmina un proceso largo y complejo que afianza la colaboración de las instituciones, siempre en aras del beneficio de la ciudadanía”. Ha coincidido con Goia en calificar este como un momento “histórico” que permitirá dar un “nuevo uso a los Cuarteles de Loiola”.
Cano ha dicho que con el dinero recibido por la operación, “podemos modernizar nuestras fuerzas armadas”, y al mismo tiempo, “contribuir al desarrollo" del municipio. La directora gerente del INVIED señaló que sin los equipos técnicos y jurídicos que han participado en la operación, este acuerdo “no habría sido posible”.
El PNV presume de "política útil"
Pactó en Madrid durante la negociación de los Presupuestos del Estado en 2021.
“Esto es política útil. Un terreno de más de 17 hectáreas de estricto uso militar pasa desde hoy a formar parte del futuro de Donostia como un nuevo barrio en el que se construirán alrededor de 1.700 viviendas protegidas. Así es como trabajamos en el PNV, buscando soluciones para la ciudadanía vasca en las negociaciones que peleamos cada día en Madrid”. La portavoz jeltzale en el Congreso, Maribel Vaquero, aplaudió ayer la firma de compraventa de los terrenos de Loiola, recordando que supone la culminación del pacto alcanzado entre el Grupo Vasco y el Ejecutivo español durante la negociación de los Presupuestos Generales del Estado de 2021.
Aunque ha afirmado que las gestiones sobre el futuro emplazamiento de las fuerzas armadas en nuestro territorio “se están llevando a cabo ahora”, Cano no ha querido ofrecer más información a este respecto”.
En todo caso, Goia ha recordado que actualmente en Donostia, Defensa mantiene como propiedades la antigua Hípica y Lore Toki, después de que en los últimos años se hayan desafectado otros espacios que tenía también en Ulia, Zorroaga y Miramon (donde se emplaza el parking provisional del hospital Donostia).
EH Bildu pide que se consensue el nombre del nuevo barrio, al contrario de lo que se ha hecho en Ciudad Jardín
El alcalde también ha puntualizado que “la residencia que está al lado de los Cuarteles”, “el que está en la subida a Uba”, se queda y sigue siendo del Ministerio de Defensa: Ahí vive gente”, ha recordado.
"Un precio alto" para EH Bildu"
El grupo municipal de EH Bildu en el Ayuntamiento de Donostia, principal partido de la oposición, también ha calificado de “hito histórico” y “buena noticia” la compra de los terrenos de los cuarteles, pero ha lamentado que la cantidad abonada, 73,3 millones de euros, “se asemeja más a una compraventa a un particular”.
Por ello, el portavoz de la coalición, Juan Carlos Izagirre ha pedido “gestionar correctamente esta oportunidad”, y solicita al Gobierno Municipal (PNV y PSE) que busque “consensos con el resto de fuerzas políticas y con los y las vecinas de los barrios circundantes: Loiola, Txomin Enea y Martutene”.
Izagirre señala que “estos barrios de la ciudad tienen evidentes carencias que a día de hoy siguen sin ser resarcidas. Y que hablar de equipamientos de ciudad, tal y como ha expresado el alcalde, no puede eximir a este Gobierno Municipal de atender estas demandas y habilitar los equipamientos de barrio que tan necesarios son para una vida digna en los mismos”.
EH Bildu cree, por otra parte, que “el nombre del futuro barrio debe también consensuarse y no imponerse como se ha hecho en Ciudad Jardín, en Loiola, recientemente.