Decenas de conductores de Dbus, la compañía de transporte público urbano de Donostia, se han concentrado este miércoles en el Boulevard donostiarra para exigir a las administraciones medidas concretas para garantizar su seguridad.
La protesta fue convocada por el comité de empresa tras la agresión que sufrió el pasado domingo un chófer por parte de un viajero al que pidió que bajara del vehículo.
Los hechos ocurrieron sobre las 21.20 horas en un autobús de la línea 26, en la parada Loiola 12, según informó el consistorio en un comunicado.
La misma fuente precisó que, tras producirse la discusión entre dos pasajeros en el interior del autobús, el conductor indicó a uno de ellos que abandonase el vehículo.
Esta persona "mantuvo unas palabras con el conductor y le lanzó un objeto a la cara al bajarse", lo que le causó pequeñas heridas, de las que fue atendido en un centro sanitario. El chófer presentó después una denuncia ante la Guardia Municipal.
Agresiones
Medio centenar de conductores se han concentrado este miércoles en la intersección del Boulevard con la calle Hernani tras una pancarta con el lema "No a las agresiones".
Durante la concentración silenciosa, Mikel Castro, delegado de UGT, sindicato mayoritario en el comité, ha denunciado la inseguridad "creciente" que sufren los chóferes de los conductores que son objeto de agresiones tanto físicas como verbales.
UGT asegura que, por desgracia, la agresión del pasado domingo no supone un hecho aislado ya que las agresiones verbales son habituales, lo que resulta inaceptable y altera el normal desarrollo de los servicios.
Castro ha pedido la implicación de las instituciones para solucionar esta situación que, según denuncia UGT, altera el normal desarrollo de los servicios y pone en riesgo la seguridad tanto de los usuarios como de los trabajadores.