En los últimos seis meses en Euskadi ha habido dos fallecimientos por electrocución en torres de alta tensión, una en Bizkaia y la otra en Araba. En territorio vizcaino, además, murió otro joven en 2023.
El pasado 15 de enero fue hallado el cadáver de un hombre de 57 años en una finca cercana a Vitoria, en Gamarra, junto a una torre de alta tensión y con signos de que podría haber muerto electrocutado de manera accidental.
Según las posteriores investigaciones, el hombre, que fue encontrado por el propietario de la parcela, llevaría por lo menos quince días fallecido.
Seis meses antes, en la noche del 15 de junio de 2024 también perdió la vida electrocutado un joven de 15 años en Sopela. El menor fue hallado a los pies de una torre de alta tensión, por lo que todo apunta a que habría fallecido como consecuencia de una descarga eléctrica.
En esta ocasión, el trágico suceso tuvo lugar en una zona boscosa frecuentada por los jóvenes de la zona al estar cercana a un complejo de supermercados y de un campo de fútbol.
Fallecido en Lemoiz
A estas dos muertes hay que sumar, además, el fallecimiento de otro varón, de 21 años, el 30 de noviembre de 2023 en una torre de alta tensión en Lemoiz. En esta ocasión, el cuerpo sin vida apareció en las proximidades de las instalaciones en desuso donde se iba a poner en marcha una central nuclear en el barrio de Basorda.
Al igual que los otros dos fallecidos, la víctima presentaba heridas compatibles con una descarga eléctrica.
