La Fiscalía ha mantenido este lunes su petición de 11 años de cárcel para un joven acusado de abusar sexualmente de una niña de 13 años, fugada de un centro de menores tutelados, durante los cuatro días en los que convivió con él en una habitación de un piso de Errenteria.

Durante el juicio por estos hechos, que ha quedado hoy visto para sentencia en la Sección Primera de la Audiencia Provincial, la defensa ha reclamado la libre absolución de su cliente.

Además de la citada pena de prisión, el Ministerio Público ha pedido por su parte, si finalmente es condenado, que el inculpado sea expulsado de España tras cumplir los nueve primeros años de la pena y que no pueda regresar a nuestro país en los nueve años siguientes.

Medidas

Además, ha solicitado para el varón una medida de libertad vigilada durante siete años en los que se le prohibirá acercarse a la menor y comunicarse con ella y que participe en "programas formativos en materia de educación sexual, igualdad de género y trato no discriminatorio".

En su escrito de acusación provisional, La Fiscalía demanda igualmente que el hombre, que cuando sucedieron los hechos tenía 19 años, sea inhabilitado quince años para cualquier profesión que conlleve contacto regular y directo con menores de edad.

Los hechos se remontan al 1 de septiembre de 2020, cuando la víctima se dio a la fuga del citado centro, tras lo que conoció al acusado con el que convivió entre el 8 y el 11 de septiembre en un domicilio de Errenteria.

La Fiscalía concreta que durante este período de tiempo el encausado, "guiado por un ánimo libidinoso" habría realizado "actos de naturaleza sexual" con la adolescente "prevaliéndose de su poca edad" y de su "situación de especial vulnerabilidad", siendo además "consciente" de su edad