Este pasado viernes ha sido DBus, con unas cifras insólitas el mes de julio: récord histórico de viajes en un solo mes: 2.776.446, lo que se traduce en más de 89.500 viajeros cada día en los autobuses urbanos de Donostia. Pero el crecimiento del transporte público y la utilización de la tarjeta Mugi en Gipuzkoa sigue en escalada en toda su dimensión, con un incremento de más del 20% de usuarios únicos en dos años, desde que entraron en vigor los descuentos del 50% aplicados al transporte público el 1 de septiembre de 2022. Hoy hace exactamente dos años.

El crecimiento es constante y sostenido y las cifras apuntan ya a un cambio de paradigma en la movilidad, especialmente en los núcleos más poblados y con mayores opciones de transporte público. Y especialmente entre los jóvenes. Las cifras así lo indican, aunque también apuntan una desigualdad notable en su uso en distintas zonas del territorio, donde las opciones de transporte público no ofrecen tanta frecuencia y cobertura.

En dos años han aumentado un 20% las personas únicas que utilizan la tarjeta de descuentos Mugi en el transporte público y un 24% los viajes realizados con esta fórmula de pago. Es decir, no sólo ha aumentado el número de usuarios, sino que se percibe entre ellos un efecto extra.

Y todo ello, a pesar de que el uso de la Mugi se ha visto lastrado respecto a 2022 en el servicio de Cercanías de Renfe, cuyos abonos gratuitos han provocado que muchos usuarios descarten el uso de la Mugi en la línea Brinkola-Irun. La caída de la Mugi en este tren es del 21% y del 67% la de los viajes abonados con la propia Mugi. Es decir, el uso de la tarjeta no ha perdido tantos usuarios totales en el mes a mes de Renfe, pero su uso es más ocasional.

Pues bien, a pesar de la caída en Renfe, la Mugi sigue mostrando un crecimiento sostenido. Es decir, el aumento del 20% de usuarios únicos en dos años no se produjo de un día para otro, con la implantación del descuento del 50%, sino que ha sido un proceso acumulativo. Sirva como ejemplo que la subida en el último año es de 12%, entre mayo y mayo, que son los últimos datos mensuales de los que disponemos.

Donostialdea, con el 44% de la población, registra el 55% de los usuarios de Mugi; por el contrario, Goierri, con un 6,2% de habitantes, sólo el 3%

El volumen de las tarjetas anónimas a nivel global es del 15% y han subido en la misma proporción que las nominales;sin embargo, se percibe que los que utilizan las anónimas realizan viajes con menos frecuencia que el resto. Son un 15% de usuarios de esta tarjeta que realizan el 10% de los viajes, en contraste con un 32% de titulares de tarjetas de colectivos especiales que sí viajan más y hacen el 36% de los trayectos.

En términos porcentuales, la subida más importante de usuarios de Mugi, se ha producido en los urbanos de Hernani: un 57% el pasado mes de mayo, frente a mayo de 2022, sin los descuentos. Son importantes también las subidas en el urbano de Eibar (40% más de usuarios), los de Irun (35%), los de Errenteria (33%) y los de Lurraldebus (30%).

Lo que no varía es la proporción de los usuarios que pagan en efectivo y con el sistema Mugi, lo que significa que el aumento del transporte público va más allá. Es decir, se mantiene el porcentaje de usuarios que pagan con la Mugi (83-84%), ocho de cada diez, en un escenario de aumento de usuarios Mugi, lo que indica que el transporte público también está atrayendo a más viajeros que aún no se han sumado al sistema de descuentos.

En todo caso, en 2024 Mugi va a superar las cifras del año pasado con toda seguridad. Además de la propia tendencia a más usuarios en la mayoría de las líneas, que se mantiene, hay que añadir que este año se han incorporado al sistema de descuentos la motora de Pasaia, que da servicio a un entorno en el que viven unas 100.000 personas; y también el servicio de autobús al aeropuerto. Pero además este verano se han reforzado los servicios nocturnos de autobús en muchas fiestas patronales.

En términos porcentuales, los mayores incrementos de usuarios se ha producido en los urbanos de Hernani (57%), Irun (35%) y Errenteria (33%)

La implantación de la Mugi entre los jóvenes es, de hecho, uno de los aspectos más importantes que apunta hacia el citado cambio de paradigma. Su uso entre la juventud está muy extendido: si comparamos el dato ofrecido el pasado mes de julio, durante el balance del ejercicio 2023 del sistema Mugi, vemos que en las tarjetas bonificadas, destaca la personalizada Mugi Jóvenes, con 75.533 usuarios en el primer semestre de 2023, frente a los 34.503 usuarios de la tarjeta de mayores.

Lagunas en el interior

La implantación de la Mugi, por su parte, tiene sus claros y oscuros. Por ejemplo, Donostia es donde más tirón tiene. En la capital, que agrupa al 25,6% de la población de Gipuzkoa, se mueve el 33% de las tarjetas. Y en el resto de Donostialdea (18,3% de la población y 22% de usuarios) en general, el peso de la Mugi es mayor que en otras comarcas. Entre la capital y alrededores se concentra, de hecho, el 44% de la población y el 55% de los usuarios del sistema Mugi.

Por el contrario, es en las comarcas de Urola y Garaia, Tolosaldea y sobre todo Goierri, donde menos tirón tiene este sistema en relación a su población. En el caso de Goierri, con el 6,2% de la población, se registran sólo el 3% de los usuarios; en Urola Garaia, con un 3,5% de la población del territorio, los usuarios son el 2% del total. Y en Tolosaldea, que tiene un 8,6% de la población, los usuarios son el 5%. Las tres, sin embargo, tienen servicio de Cercanías.

Por otra parte, este balance entre población y usuarios de Mugi está más equilibrado en Bidasoa-Txingudi (10,9% de la población y 10% de usuarios Mugi), Debagoiena (8,6% de población y 8% de usuarios Mugi), Debabarrena (7,6% frente a 7%), Urola Kosta (6,1% y 6%) y Urola Erdia (4,5% y 4% de usuarios).

Las cifras dicen que la continuidad de los descuentos funciona. Y aunque por el momento no se ha decidido si se aplicarán en 2025, los números invitan a pensar que una retirada de las mismas, chocaría con el objetivo de impulsar el transporte público