Desde este sábado y durante las próximas tres semanas los viajeros de Renfe deberán olvidarse del tren y coger un autobús para desplazarse entre Irun y Donostia. El servicio ferroviario queda interrumpido desde esta jornada como consecuencia de las obras que Adif debe acometer para la construcción del TAV, lo que ha llevado al operador a programar más de 2.500 circulaciones de autobuses hasta el próximo día 25. Este fin de semana, así como durante los días 24 y 25 de este mes, el corte se extenderá hasta la estación de Hernani.
Con motivo de esta interrupción, que afecta tanto al Cercanías entre Irun y Donostia como a los trayectos de Media y Larga Distancia, Renfe ha planificado servicios alternativos en autobús que circularán en los mismos horarios que los trenes habituales y que realizarán las mismas paradas. De este modo, está previsto que el primer autobús salga este sábado y el domingo desde Irun a las 4.29 horas y haga lo propio desde Hernani a las 6.14 horas, mientras que de lunes a viernes la primera salida será a las 4.21 horas desde Irun y a las 6.36 horas desde la capital guipuzcoana.
En total, el plan incluye 32 circulaciones de autobuses para este fin de semana, 2.204 entre el lunes y el día 23 y 232 circulaciones de cara al último fin de semana de interrupción. En el caso del servicio entre las estaciones de Martutene y Loiola el transbordo se realizará con microbuses que enlazarán con el tren en Hernani y el autobús en Donostia.
Según dieron a conocer desde la compañía, los billetes y abonos de Renfe servirán para poder acceder a los autobuses. Además, se ha reforzado el personal de Cercanías con el objetivo de ayudar y guiar a todos los usuarios, se han colocado diferentes paneles explicativos en las estaciones y se han actualizado tanto la página web como la APP con toda la información relativa al corte.
Asimismo, con el objetivo de facilitar y agilizar el trayecto entre Irun y Donostia, se aceptarán los bonos gratuitos de Renfe en el Topo durante el tiempo en el que permanezca el servicio interrumpido.
En el caso de los trenes de Media Distancia, circularán autobuses entre Irun y Andoain, en ambos sentidos, con paradas en Irun, Lezo-Errenteria, Pasaia, Donostia y Andoain, mientras que en los de Larga Distancia con destino y origen en Madrid será necesario hacer transbordo entre Tolosa e Irun, y en el servicio Barcelona-Donostia habrá transbordo por carretera entre Pamplona y la capital guipuzcoana.
Situación del servicio
El corte del servicio permitirá avanzar en las labores de construcción del TAV en los túneles de Loiola, en Donostia, y de Kaputxinos, en Errenteria. Ambas infraestructuras deben quedar libres para que Adif puede acometer los trabajos en la zona, por lo que se optó por agosto, el mes que menos usuarios registra el servicio, para ello.
Antes, desde el 29 abril, el horario ya había sido adaptado con motivo de la implantación de la única vía y la limitación de velocidad entre Hernani y Donostia, lo que obligó a reducir la oferta horaria y aumentar el tiempo del corredor Irun-Brinkola.
Todas estas actuaciones llevaron a que varios alcaldes del territorio mostraran su queja ante la situación del servicio, lo que derivó en una reunión entre el secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano; el consejero vasco de Transportes, Iñaki Arriola; y los máximos ediles del corredor Irun-Brinkola, que se tradujo, asimismo, en una comisión de seguimiento que informará de los cortes y planes alternativos en todo momento.
La situación de incertidumbre del servicio de Cercanías, no obstante, no está cerca de solucionarse, ya que se estima que los trabajos se prolonguen, al menos, dos años y medio más, hasta que la infraestructura para la alta velocidad esté lista. De hecho, de cara al mes de agosto del próximo año se espera que el corredor vuelva a tener que ser paralizado.
