La Parte Vieja donostiarra cuenta ya con un Plan de Prevención de Riesgos que contempla, entre otras acciones, “la formación en prevención y extinción de incendios del personal de los establecimientos hosteleros.

Esta formación se presenta como más necesaria si se toma en cuenta que en los últimos meses se ha dado más de un episodio de fuego que ha tenido su origen en las instalaciones hosteleras y en viviendas de barrio, lo que “ha generado alarma” en el mismo.

El alcalde de Donostia, Eneko Goia, ha explicado que este plan quiere dar respuesta a una realidad algo singular, la de una Parte Vieja en la que la estructura de los edificios es en su mayor parte de madera, por lo que los incendios pueden tener “consecuencias mucho más graves”.

De ahí que las inspecciones se hayan llevado a cabo “de forma habitual” e, incluso, “con mayor intensidad que en otros puntos de la ciudad”

Pero, pese a todo, el Ayuntamiento ha considerado que era necesario “reforzar” esta vigilancia y proceder a actuar con un planteamiento “integral”, porque, ha destacado Goia, aunque la mirada se centra en los establecimientos hosteleros los datos señalan que el problema tiene un alcance más amplio.

Incendios desde 2021

Goia ha dado cuenta de los datos de incendios en la Parte Vieja. Desde 2021 la mayor parte, 35, han tenido su origen en hogares; nueve, en establecimientos hosteleros y cinco en otro tipo de establecimientos. 

“Estos datos nos demuestran que tenemos que elaborar un plan que abarque a todo el barrio y no se fije solo en los establecimientos hosteleros”, ha abundado el primer edil.

El plan contempla el área que abarca la Parte Vieja, la zona que discurre entre la calle Aldamar y el paseo de Salamanca, y el Puerto.

Para su diseño el Consistorio ha contado con la implicación de presidentes de comunidades de vecinos, con la Asociación de Hostelería y con las y los comerciantes “para que todos se impliquen en un mismo objetivo”.

Tres tipos de acciones

El plan contempla tres tipos de acciones: una campaña de información, formación y sensibilización dirigida a las personas residentes; la toma de datos para analizar la situación actual y proceder en la prevención de riesgos en los establecimientos, y la formación en prevención y extinción de incendios del personal de estos establecimientos.

Según ha apuntado Goia, en las inspecciones estarán implicadas distintas áreas municipales: Urbanismo, Bomberos, Guardia Municipal y Salud. Además, también se ha incluido a Iberdrola y el departamento de Industria del Gobierno Vasco.

“Se vigilará que las cosas estén como tienen que estar y cuando no lo estén actuar”, ha abundado Goia.

“Buscamos garantizar la seguridad de la Parte Vieja y responder a la inquietud expresada por las y los vecinos y vecinas”, ha añadido.

Preguntado sobre las causa de los fuegos Goia ha apuntado que hay “de todo un poco”. “En los domicilios pueden darse accidentes en la cocina o existir instalaciones eléctricas deficientes o viejas. Pero en la Parte Vieja las consecuencias de un fuego pueden ser peores”, ha destacado.

“En el caso de los establecimientos hosteleros las causas responden, en ocasiones, al mal mantenimiento de algunos elementos de la cocina, sobre todo por limpieza, y también a la falta de pericia por parte de los empleados. Por eso hemos hecho hincapié en la formación para que la respuesta que se dé sea la adecuada y se sepa cómo actuar, por ejemplo, ante una sartén que arde u otros episodios”, ha incidido Goia.

En el caso de los comercios, la mayor parte de los incendios tiene su origen en una instalación eléctrica deficiente.

Goia, además, ha querido apuntar que desde el Ayuntamiento ya se han adoptado distintas medidas para facilitar la labor de los bomberos. “Uno de los motivos por los que se procedió a la retirada de los toldos es precisamente ese, que no se produzcan esas situaciones”, ha añadido.

Por último, el alcalde ha asegurado que el nivel de inspección que se lleva a cabo en la Parte Vieja es “alto, superior a la proporción del resto del municipio”, que como consecuencia da “distintos tipos incidencias” que derivan en la apertura de expedientes.

Para realizar el control, a la unidad especializada de la Guardia Municipal se le suman “dos arquitectos del área de Urbanismo”, trabajadores de Salud Pública y Bomberos. 

“Se pretende revisar todos los establecimientos en un ejercicio. Antes se hacía desde la unidad de Salud, pero hora queremos que lo hagan los distintos departamentos”, ha incidido Goia.

El Plan

El Plan que impulsa el Ayuntamiento “engloba tanto a los edificios como a la vía pública” y distingue a las viviendas y a los establecimientos hosteleros.

En el caso de las viviendas se hará llegar a los hogares “información relevante de interés para la prevención de incendios y se trabajará en asesorar a las comunidades para la instalación de detectores o elementos de extinción”.

En los establecimientos hosteleros, tras realizar las oportunas visitas para evaluar su situación y “las medidas de evacuación, detección, transmisión de alarma, control y extinción de incendios”, se procederá a realizar las recomendaciones oportunas para la mejora de la seguridad.

El Plan contempla también valorar otros aspectos de interés y vinculados con los incendios, como las instalaciones, la limpieza y desinfección, la conservación, identificación y manipulación de distintos productos, etc.

El documento será objeto de un proceso de mejora continua, control y seguimiento por parte del Ayuntamiento, en el que estará involucrado, asimismo, personal de los departamentos relacionados con esta materia. De este modo, además, resultará más sencillo llevar a cabo propuestas de actuación a corto y medio plazo.