El juez impuso al joven que presuntamente robó en Barakaldo la pistola particular de un ertzaina la obligación de portar una pulsera telemática de localización para garantizar que no se acerca a manos de 500 metros de su expareja, víctima de violencia machista.
El consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, ha desvelado este dato este miércoles en una rueda de prensa en Bilbao, en la que ha afirmado que la mujer tendrá una seguridad "reforzada" hasta que se considere oportuno mantener esa medida, adoptada en cuanto se supo que su expareja era el presunto autor del robo de la pistola.
Erkoreka ha afirmado que la Ertzaintza continúa la investigación para tratar de encontrar la pistola sustraída y que se estudian las "andanzas" del presunto autor del robo, que fue identificado en base a los datos aportados por un testigo, según ha dicho el consejero.
El joven, de 19 años, quedó en libertad el pasado lunes, con la obligación de comparecer quincenalmente, tras prestar declaración el mismo día en el juzgado de instrucción de Barakaldo, después de que el Ministerio Fiscal solicitara prisión para el imputado.
Una semana antes, después de que se presentara en la comisaría de Bilbao tras dos días de búsqueda por parte de la Ertzaintza, el sospechoso ya fue puesto a disposición del juzgado de guardia de Bilbao, pero no por el robo del arma sino por una requisitoria del juzgado que llevó su caso de violencia de género para comunicarle la sentencia condenatoria que había adoptado en verano.
