Hay un componente finalista en este proceso, que es ganarse el pan. ¿Hasta qué punto podemos influir los padres en la decisión de nuestros hijos a la hora de elegir una carrera? ¿Qué es mejor, algo que les guste o algo que les ayude a tener mejor salida?

–Muchas veces se nos plantea, a mí en concreto como vicerrector de Estudiantes y Empleabilidad también: ¿qué es más importante a la hora de elegir?, ¿la vocación o factores más prácticos de empleabilidad, que la carrera tenga salida? Es decir, ¿si yo quiero hacer una carrera que me gusta muchísimo, pero luego la empleabilidad no es buena? ¿Qué criterio sigo?

¿Y cuál seguimos?

–Yo creo que esta dicotomía a día de hoy es falsa, porque desde mi punto de vista lo que tiene que interseccionar en estos dos factores es precisamente la orientación. Si tienes vocación de ingeniero, pero te cuesta en matemáticas, alguien debería sugerirte previamente que hay otras opciones para ti, porque vas a necesitar un alto grado de competencia en matemáticas para ser ingeniero y si no las tienes, vas a fracasar. Esta es la función de la orientación, que es fundamental. Lo que escojan los estudiantes, que luego van a tener que hacer una carrera con cuatro años o más, con cierto sacrificio o dureza, tiene que ajustarse a las habilidades, capacidades, y por qué no, a los gustos de cada uno. La vocación es importante sin lugar a dudas, pero la vocación a secas te puede llevar al desastre.

“La elección tiene que orientarse a las habilidades propias; la vocación a secas te puede llevar al desastre”

Y luego estamos los padres.

–Los padres influyen muchísimo, eso lo vemos en las ferias de orientación, donde los futuros estudiantes universitarios vienen normalmente acompañados de su padre, su madre o ambos dos. Ahí encuentras todo tipo de situaciones. 

¿Tendemos menos hacia el humanismo y más hacia lo técnico?

–No lo diría de esa manera. Nosotros ofrecemos titulaciones de todos los ámbitos del conocimiento. Para el curso que viene ofrecemos 107 titulaciones de grado. Yo lo que sí diría es que las hay clásicas, y siguen yendo bien: las ciencias de la Salud, Odontología... Y es difícil entrar en esas titulaciones, que piden notas de corte muy altas; entran estudiantes muy buenos. Son titulaciones exigentes, como Medicina, por ejemplo, que es la titulación más larga, son seis años de grado. Pero luego tienen buenas salidas profesionales. Luego diría que hay otras titulaciones clásicas, y siguen funcionando bien, como son Administración y Dirección de Empresa (ADE) y hoy en día lo que está funcionando muy bien son los dobles grados.

10/02/2023. Entrevista a Fernando Tapia, vicerrector de la UPV. Iba eta. IKER AZURMENDI Iker Azurmendi

¿Y qué perfiles demanda la empresa? ¿Generamos lo que demandan?

–Es conocido que hay una gran demanda por parte de las empresas de estudiantes con perfil STEM, de ciencias, tecnología, ingeniería, matemáticas, etcétera. Y parece, así se nos está trasladando, que las empresas vascas tienen cada vez más dificultades para encontrar estos perfiles que tengan que ver con la gestión de datos, la ingeniería informática, inteligencia artificial, matemática, etcétera; son perfiles en este momento muy demandados. Nosotros lo vemos en la feria de empleo. Muchísimas empresas vienen expresamente a buscar este tipo de perfiles que son escasos. Las propias patronales, de hecho, lo dicen. Adegi hizo público un informe en mayo del año pasado y llegaban a esta conclusión, que hay una necesidad que además va a seguir aumentando en los próximos años.

¿A quién le toca hacer pedagogía en ese sentido para hacer adecuar las necesidades de nuestro mercado laboral con las demandas formativas de los jóvenes?

–Nos toca a todos, y además lo estamos haciendo. El Gobierno Vasco tiene una estrategia STEM, nosotros como universidad también tenemos diversas acciones orientadas a favorecer el nacimiento de vocaciones STEM. Son muchas las iniciativas en este sentido y lo importante es identificar los factores que generan esta carencia. Podríamos hablar mucho de este tema y nos llevaría, por ejemplo, a tratar sobre la feminización de algunas carreras, y al mismo tiempo, sobre la masculinización de las carreras STEM precisamente. Es algo que ha condicionado de forma determinante esta situación.

Lo cierto es que son más las mujeres universitarias, pero no apuestan por estos grados de más futuro o más demandados.

–No, tradicionalmente no. En ciencias de la Salud, tenemos titulaciones que están muy feminizadas; en otros ámbitos que tienen que ver con el cuidado, y los servicios sociales también tradicionalmente han sido más las mujeres; en otras carreras, en ciencias económicas y jurídicas también las mujeres están adelantando a pasos agigantados a los a hombres, pero en las carreras técnicas, sobre todo, en ingeniería y demás, son mayoría los hombres. Y el porcentaje de mujeres en esas carreras es muy, muy bajo.

“Lo vemos en las ferias de empleo, las empresas vienen expresamente buscando un perfil técnico, que es escaso”

¿Qué se puede hacer para revertir eso?

–Tenemos programas dentro de la Universidad para intentar despertar vocaciones STEM dentro de las mujeres. Nos consta que las Administraciones públicas también están haciendo un esfuerzo en esta vía. No existe un único factor que determine esto, pero es algo a lo que estamos intentando responder. Y viendo que la falta de profesionales de estos perfiles ya prácticamente se está convirtiendo en un problema de país, pues tenemos que darle solución de forma urgente.

A nivel de país, precisamente, ¿cómo de valorada es la formación que damos a los universitarios vascos? ¿Cómo se percibe en el exterior?

–Nuestros estudiantes adquieren una formación que es muy valorada por las entidades empleadoras y otro tipo de entidades, dentro y fuera de Euskadi. Cada vez más, los estudiantes jóvenes, además de adquirir competencias técnicas, adquieren competencias transversales que facilitan su inserción en el mercado laboral. Hoy en día, de hecho, cuando vas a una entrevista de trabajo no te preguntan qué has estudiado, porque ya tienen tu curriculum

¿Qué otros aspectos se valoran?

–Te preguntan qué sabes hacer. Se valoran la creatividad, el espíritu emprendedor, la capacidad de desenvolverte en entornos multilingües, si has tenido una experiencia laboral, prácticas durante tu formación, tanto curriculares como no; te preguntan, y esto cada vez es más importante, si has tenido una experiencia internacional, si has participado en un programa de movilidad internacional, como puede ser Erasmus u otro por el estilo. Nuestros estudiantes pueden sin duda destacar en todos estos aspectos. Cada vez son más los que hacen una movilidad internacional, de hecho. Esta generación de estudiantes es muy competente desde el punto de vista multilingüe, son capaces de trabajar en entornos multilingües.