Jokin Aperribay entregó este lunes a Roberto Olabe la insignia de oro y brillantes por su trayectoria en la Real. El espectacular acto organizado en el Auditorio de Anoeta por la entidad, en el que estuvieron presentes muchos exjugadores, la plantilla del Sanse que la víspera se impuso en Mérida, futbolistas juveniles y técnicos y trabajadores del club que han coincidido todos estos años con él. Olabe no quiso responder a preguntas en su despedida y tanto él como Aperribay se lanzaron piropos en sus discursos de despedida.