Lisboa. Sábado 28 de octubre. Mientras los jugadores de la Real Sociedad llegan a su hotel en Madrid, donde al día siguiente espera el Rayo Vallecano, el estadio Da Luz lamenta con tormenta de silbidos un nuevo resultado adverso del Benfica. El descontento de la hinchada ya había sido evidente el martes previo, con motivo de la exhibición txuri-urdin en la Champions League (0-1). Esta vez, sin embargo, la magnitud del tropiezo se multiplica, pues este llega en la liga portuguesa y contra el modesto Casa Pía, que arranca un empate (1-1) del feudo encarnado. Antes del gol visitante, anotado en el minuto 81, el meta Trubin ya ha parado un penalti, y la sensación generalizada apunta a que algo hay que cambiar de cara al futuro, posibilidad que también contempla el entrenador Roger Schmidt. Las posteriores decisiones del técnico y las circunstancias del propio fútbol han provocado que el rival blanquiazul vaya a mostrar, este miércoles en Anoeta (18.45 horas), una cara bastante variada respecto a la de hace quince días, poco tiempo en lo global pero un auténtico mundo en clave benfiquista. ¿Cuáles son las claves de la metamorfosis?
1- Nuevo sistema
El Benfica ya no juega con el 4-2-3-1 que mostró en Da Luz y que venía utilizando durante los partidos y los meses previos. El mencionado empate contra el Casa Pía pareció provocar que Roger Schmidt modificara luego el sistema (3-4-3) de cara a los dos encuentros posteriores, ante el Arouca en copa de la liga y ante el Chaves en liga. El técnico alemán, sin embargo, ha relativizado la importancia de su decisión. “Cambian la ocupación de los espacios y esto siempre obliga a matizar cosas, pero el equipo ya había jugado así previamente y puede hacerlo de nuevo sin problemas”. Lo cierto es que la variante no ha significado el típico cambio a estructura más rígida que suelen ejecutar los equipos en apuros. El Benfica se ordena de forma distinta, pero el dinamismo de sus futbolistas se mantiene y cuesta dar en su engranaje con jugadores anclados en posiciones fijas. Desde un punto de partida diferente, los lisboetas continúan proponiendo un fútbol muy parecido.
2- 'Nuevos' jugadores
A la hora de explicar el cambio de sistema, el propio Schmidt ha aludido también a la disponibilidad de futbolistas, explicando principalmente desde esta circunstancia su apuesta por el nuevo dibujo. “Tenemos jugadores que no se encuentran en su mejor momento físico, lesionados o fuera de forma. Y, en cambio, contamos con otros que no juegan tan habitualmente, que sí están en muy buenas condiciones y a los que queremos hacer un hueco”. Vistos los últimos movimientos del entrenador, analizadas sus ruedas de prensa y estudiada también la composición de la enfermería benfiquista, resulta bastante fácil poner nombres propios a sus palabras. Cuando las pronunció, Neres, Kokçu y Bah, ausentes por lesión en Anoeta, ya se habían lesionado. El lateral izquierdo Bernat, quien también ha terminado cayendo, acumulaba varias semanas entre algodones, igual que el checo Jurasek, lastrado por problemas físicos. Y, en cambio, elementos interesantes como el central brasileño Morato o Gonçalo Guedes como falso nueve podían tener cabida, respectivamente, en una estructura con tres zagueros y en una delantera de tres atacantes ubicados en las parcelas interiores del campo.
3- Cuidado con el 87
Se llama João Neves, solo tiene 19 años y está sorprendiendo a propios extraños con su nivel y, sobre todo, con su desparpajo. El pasado enero aprovechó el traspaso de Enzo Fernández al Chelsea para irrumpir con fuerza en el primer equipo del Benfica, en la zona medular. Ahí jugó también hace dos semanas contra la Real, pero ahora lo hace en una demarcación muy distinta, la de carrilero derecho. Es a él a quien más le ha cambiado la película con el nuevo dibujo, y no es que se esté limitando a cumplir, es que está resultando diferencial pegado a la banda. El sábado protagonizó un eslálom digno de extremo puro para limpiarse a tres rivales y servir a Cabral (luego remachó Aursnes) el 0-1 contra el Chaves. Visto lo visto, la prensa lusa ya teme por su continuidad en el club a partir de junio, de enero incluso, y los elogios al chaval proceden hasta del mismísimo seleccionador portugués Roberto Martínez, quien ya le incluyó en su última convocatoria. Cuidado con él. Lleva el 87 a la espalda.
4- Derbi a la vista
Por cambiar respecto a Lisboa, cambia hasta el contexto competitivo (calendario) desde el que el Benfica encara su enfrentamiento con la Real. En la primera vuelta del grupo, los portugueses recibieron al cuadro txuri-urdin después de enfrentarse a un equipo de cuarta división en la copa (victoria 1-4 contra el Lusitania) y antes de medirse en su estadio al citado Casa Pía, en encuentro de liga. Ahora, mientras, el conjunto de Roger Schmidt viaja a Donostia en circunstancias muy distintas. En su partido previo, de nuevo en liga y en el campo del Chaves, no hubo este sábado sitio para las rotaciones, al existir cierta obligación de victoria para no perder comba respecto al líder. En el encuentro posterior, mientras, los benfiquistas se medirán este domingo precisamente al propio líder, su vecino Sporting, en el derbi del estadio José Alvalade. Se tratará de una cita sumamente importante para el conjunto encarnado, que quedará a seis puntos de la primera plaza en caso de derrota, aunque la prensa lisboeta subraya estos días la importancia de no caer en la Champions. El rival realista necesita ganar este miércoles para mantenerse con vida, por mucho que un empate le otorgue aún remotas opciones de pase.
