La Real estuvo a punto de remontar un 3-0 al Inter en la temporada 1979-80. El equipo de Alberto Ormaetxea se quedó en la orilla de una voltereta histórica al imponerse en un Atotxa abarrotado y entregado por 2-0. Los dos goles que les permitieron acariciar la hazaña llevaron la firma de Jesús Mari Satrústegui, el mejor 9 y el máximo anotador en la historia del club. No va a ser nada sencillo lograr la hazaña de doblegar de nuevo a uno de los gigantes transalpinos mañana en Anoeta, sobre todo porque la Real sigue sin contar con los goles de sus delanteros centro cuando ya ha pasado más de un mes desde el inicio de la competición y se llevan disputadas cinco jornadas de Liga. Para muchos, la entidad txuri-urdin dispone de la plantilla más completa de su historia, pero queda para la duda razonable si dispone de mejor equipo que el curso anterior. Sobre todo porque, a día de hoy, le falta la aportación de un pilar indispensable que son los goles de sus 9.

Satrus, en el partido de Atotxa ante el Inter de Milán. Real Sociedad

Ni Carlos Fernández, Sadiq Umar y André Silva, sus arietes específicos o puros, ni Mikel Oyarzabal, que es la solución de emergencia a la que ha recurrido Imanol Alguacil en lo que implica un reconocimiento implícito del problema, han visto portería en lo que llevamos de temporada. Y lo más grave aún es que tampoco han estado demasiado cerca de hacerlo.

Como todo el mundo sabe, Carlos Fernández arrancó el campeonato de titular en lo que se percibía como una oportunidad que no podía desaprovechar después de un último curso bastante decepcionante. Ante el Girona y el Celta no cuajó malas actuaciones, intervino bastante en el juego y dejó pinceladas interesantes como el arrastre en la diana de Kubo frente al Girona, pero desgraciadamente para él no cumplió con su cometido, que es marcar goles. En el descanso de Las Palmas, en la tercera jornada, después de unos primeros 45 minutos muy malos, Imanol le quitó y no le ha vuelto a dar ningún minuto.

Sadiq Umar, que cuajó una actuación ilusionante en el amistoso ante el Bayer de finales de julio, todavía no ha sido titular en lo que llevamos de campaña. Se intuía que le iba a costar, como a todos los que regresan de una rotura del cruzado, pero al revés que a otros compañeros, en lugar de sufrir problemas musculares como daños colaterales del proceso de recuperación, lo que ha tenido ha sido molestias en la rodilla operada, que incluso se le ha hinchado, lo que le impidió viajar a la gira de Estados Unidos y trabajar la primera semana del parón.

André Silva empezó a entrenar con el grupo el pasado viernes, por lo que, como quien dice, acaba de iniciar su pretemporada, así que todavía necesitará algunas semanas para recibir el alta competitiva, término que se inventó Mourinho para defenestrar a Casillas.

André Silva, entrenado en Zubieta junto al readaptador Alain Gandiaga. Pedro Martinez

Y, por último, Oyarzabal. El comodín hasta la fecha de Imanol. A pesar de estar lejos de su mejor nivel, el capitán sigue haciendo muchas cosas bien aunque todavía no haya logrado marcar. En Madrid tuvo la mala suerte de quedarse colgado tras hacer un buen desmarque y provocar que se anulara el 0-2 a Kubo.

El japonés es la gran baza ante el Inter al llevar tres goles y dos asistencias, además de haber participado en otras dos dianas. Barrenetxea, con otros tres, es la otra arma contundente de los blanquiazules.