Días de optimismo en el Girona, próximo rival de la Real Sociedad. El cuadro catalán ha conseguido, mediante tres victorias consecutivas (ante Real Madrid, Sevilla y Mallorca), entrar de lleno en la pelea europea, circunstancia que se ha dado además con ausencias de calado en el equipo. Resta aún una semana para que los de Míchel visiten Anoeta el próximo sábado (14.00 horas), y ahora mismo cinco futbolistas de la plantilla pueblan la enfermería.
Ibrahima Kebé, un centrocampista de Mali que llegó al club hace cuatro años para integrar el filial, permanece aún inédito esta campaña por culpa de una lesión de rodilla. Y el extremo Toni Villa acaba de iniciar su recuperación tras la rotura de ligamento cruzado que se produjo el 22 de abril en el campo del Valladolid. En lo que se refiere a dolencias musculares, mientras, se encuentran en el dique seco Yangel Herrera (sóleo), Aleix García (bíceps femoral) y Borja García (rotura en la fascia plantar). Aún es pronto para vaticinar nada, pero los plazos indicados en su momento señalan que el concurso en Anoeta de cualquiera de estos tres jugadores resultará muy complicado.
Sea como sea, la trayectoria reciente del equipo no invitaría tampoco a pensar en demasiados cambios en la alineación. El núcleo de futbolistas con los que cuenta Míchel ahora mismo está respondiendo con creces, desde estructuras, eso sí, que el técnico madrileño adapta a las circunstancias. Hace dos jornadas ganó en el Sánchez-Pizjuán defendiendo los centros laterales del Sevilla con una zaga de tres centrales. El pasado jueves ante el Mallorca, mientras, regresó a la habitual línea de cuatro para certificar un triunfo que ha disparado la ilusión en Girona, siendo Taty Castellanos la referencia actual del equipo. El punta argentino ha anotado seis goles en los tres últimos partidos.
