Superada la resaca de la victoria de la Real Sociedad en Almería, y disputado un Athletic-Osasuna saldado con empate sin goles, el derbi del próximo sábado en Anoeta (21.00 horas) se juega desde este martes, tras una larga e inusual sequía en cuanto a duelos entre txuri-urdin y rojiblancos. Se ha dado la circunstancia de que, la pasada temporada, el partido en San Mamés se jugó en las jornadas iniciales de la segunda vuelta. Y a esto se le ha unido el hecho de que, en el presente curso, el enfrentamiento de la primera vuelta se haya demorado hasta la 17ª fecha del campeonato. Así, vizcainos y guipuzcoanos se midieron por última vez el 20 de febrero de 2022. Volverán a hacerlo casi once meses después, el 14 de enero de 2023, sin contar el compromiso veraniego (Euskal Herria Txapela) de agosto en Barakaldo.
Mala serie
La Real también perdió aquel partido (1-0), el último de la pretemporada, encajando un resultado que, en cierto modo, alimenta la estadística más relevante y que alude a los encuentros de Liga disputados frente al Athletic. En este sentido, el cuadro txuri-urdin no vence a los rojiblancos desde la histórica final de Copa en La Cartuja, celebrada el 3 de abril de 2021. A aquella cita le han seguido tres derbis, saldados con dos empates y una abultada goleada encajada por los de Imanol en San Mamés (4-0), precisamente con motivo del último precedente oficial, el del mencionado 20 de febrero de 2022. Además, solo cuatro días después del partido de Sevilla tuvo lugar un enfrentamiento liguero en Anoeta (1-1), de resultado idéntico al registrado en el estadio donostiarra el 31 de octubre de 2021, cuando Muniain estableció la igualada definitiva en el tiempo de descuento.
Terreno conocido
Más adelante analizaremos la estadística general de la Real en los derbis celebrados a partir del ascenso de 2010. No es nada mala. Pero, paradójicamente, el equipo txuri-urdin ya ha conocido, durante estos últimos doce años y medio, situaciones como la actual. Perdió tres enfrentamientos consecutivos en la época de Martín Lasarte (segunda vuelta 2010-11) y Philippe Montanier (los dos partidos de la Liga 2011-12). Vivió huérfana de victorias, como el propio Athletic, aquella serie de cuatro empates seguidos durante 2014 y 2015. Y vio también cómo a Eusebio Sacristán no se le terminaron de dar bien los duelos vascos: tras ganar el primero celebrado a sus órdenes (0-1, gol de Jonathas), perdió los dos siguientes y empató el cuarto y último.
El desierto del Athletic
Así, contabilizando la serie actual, la Real ha vivido después del ascenso tres rachas de otros tantos derbis sin conocer el triunfo. Y pasó también por una sequía de cuatro enfrentamientos. Pero el Athletic ha conocido durante esta década larga una travesía del desierto mucho más dura. En abril de 2012, los entonces entrenados por Bielsa se impusieron a los txuri-urdin en San Mamés (2-0), en un duelo marcado por el gol fantasma de Carlos Vela que Mateu Lahoz no concedió. Desde aquel encuentro, vivieron ocho duelos vascos consecutivos (cuatro temporadas enteras) sin vencer al vecino, cosa que lograron por fin en octubre de 2016. Con la citada Real de Eusebio asentando aún los cimientos de un ciclo muy positivo, se impusieron 3-2, instalados ya en su nuevo estadio.
Balance
Desde que la Real ascendiera a Primera en 2010, el club blanquiazul ha ido encadenando pasos adelante que le han llevado a vivir actualmente una situación más ventajosa que el Athletic. Así lo acreditan las cifras más recientes en cuanto a billetes europeos, títulos e incluso ingresos por derechos televisivos. Pues bien, durante el camino hacia la consolidación de sus sucesivos proyectos, los txuri-urdin pueden presumir también de un mejor balance que el cuadro rojiblanco en los duelos de estos doce años.Se han jugado 25, incluida la final de Copa, con un saldo de once victorias realistas, siete empates y siete triunfos del Athletic.
