De los 190 que ha jugado, ¿con qué partido se queda?

–Con el debut. Ese día es lo más especial que he vivido, con todo lo que conlleva eso. Desde pequeñito todos los donostiarras, todos los gipuzkoarras soñamos en un momento de nuestra vida con poder debutar y jugar en la Real. Por suerte soy uno de esos pocos afortunados. Lo recuerdo como si fuera ayer. Todos los nervios de la previa del partido, del día anterior. Salió el partido redondo. Como especial, ese día. Y también el de la Copa del Rey, el haber conseguido ganar un título con la Real no se puede pedir más. Con la lástima de no haber podido estar disponible para disputarla, pero orgulloso con todo lo que he conseguido estos años. Con la conciencia tranquila de que siempre he dado lo mejor de mí, sabiendo que ha habido buenos momentos y no tan buenos, pero siempre he trabajado duro para intentar estar lo mejor posible y dar lo mejor de mí en todo momento.

¿Un compañero?

–Bufff. Muy complicado quedarme con uno. He hecho relación con mucha gente y sería muy complicado, incluso injusto, decir solo uno.

¿Un entrenador?

–Los más importantes han sido Jagoba, porque fue el que me hizo debutar y me abrió las puertas para poder jugar en la Real, quedarme, y hacer mi primer contrato con la Real. Siempre le voy a estar agradecido. También a Asier Garitano porque en un momento complicado de mi carrera deportiva me ayudó a darle al vuelta a la situación, y ese año en el Leganés me hizo dar un salto profesionalmente y personalmente también. Con Imanol me ha dado la estabilidad de hacer cuatro, cinco años buenos en Primera con la Real. Siempre que he estado disponible ha contado bastante conmigo y tenemos muy buena relación.

¿El rival que se lo haya puesto más complicado?

–Hay un partido contra el Barça de Neymar que lo guardo con mucho cariño. Fue de los primeros que jugué contra un grande. Salió todo fenomenal. Neymar creo que no estaba en su mejor momento y eso ayudó también, pero esa primera temporada disfruté mucho. Estaba muy suelto, a gusto, me sentía con mucha fuerza y fueron mis mejores momentos en la Real. ¿El peor rival? En Primera División todos los rivales son complicados. Hay mucho nivel, competencia. Siempre es fácil tirar a los equipos grandes, pero yo creo que todos los partidos son muy complicados, no te puedes relajar porque si no estás en tu mejor versión, cualquier rival te hace mucho daño.