La primera plantilla de la Real Sociedad ha regresado este lunes a los entrenamientos después de tres días de descanso. La jornada ha deparado buenas noticias en materia médica, pues ha implicado que Mikel Oyarzabal se haya reincorporado al grupo, al menos de forma parcial. El eibartarra ha completado una fase de la sesión al mismo ritmo que sus compañeros, en un paso más hacia la reaparición.

No resulta ni mucho menos descartable que la vuelta del eibartarra se produzca el domingo en Anoeta contra el Valencia (21.00 horas). Tiene aún cuatro entrenamientos por delante (el equipo descansará el jueves) para ponerse a punto y quedar a disposición de Imanol Alguacil.

También han estado en Zubieta, aunque no han participado en el trabajo colectivo, Mikel Merino y Alexander Isak. En este sentido, las noticias también han sido buenas, ya que navarro y sueco se han presentado en las instalaciones en buenas condiciones, sin problemas físicos. Este domingo, ambos mantuvieron sobre el césped de La Cartuja una charla en la que el centrocampista hablaba con mal gesto sobre el estado de su rodilla, aunque parece que la torsión que arrastra desde el triunfo en El Sadar no ha ido finalmente a mayores.

Igor Zubeldia ha supuesto la nota negativa de la matinal en Zubieta, pues continúa ejercitándose al margen once días después del partido en Anoeta contra el Sturm Graz. Llegó al mismo con el pubis castigado y el encuentro europeo supuso la gota que colmó el vaso. El azkoitiarra, con problemas en la zona durante todo el curso, se perdió después la visita a Osasuna, pero el descanso no le ha permitido aún reincorporarse al grupo.

Apunta a causar baja contra el Valencia, como Nacho Monreal, Guridi y Carlos Fernández. Asier Illarramendi, mientras, continúa entrenándose con normalidad, a la espera de que Imanol le vea ya en condiciones para integrar una convocatoria.