- El auge del proyecto de la Real ha ido de la mano del experimentado por el fútbol femenino en general. ¿Cómo ve este proceso?
-¿El del fútbol femenino? Ahora mismo siento incertidumbre. El coronavirus está afectando a absolutamente todo. A todos los sectores, a todos los trabajos, a todos los deportes... Y va a dejar rastro. Lo está haciendo en el fútbol masculino. Así que también va a dejarse notar en el femenino. Espero que entre clubes y Federación se esfuercen por evitar dar ahora un paso atrás respecto al auge que vivíamos antes de la crisis. Ya habrá tiempo luego para seguir dando pasos adelante.
¿En qué posición ve a la Real?
-La Real ha vivido una buena temporada. No estoy muy de acuerdo en que el año haya resultado malo. La gente debe tener en cuenta que, cuando logras un éxito como la Copa es muy difícil repetir resultados así. Es verdad que el equipo se reforzó el pasado verano con buenas jugadoras, pero también salimos personas que ayudábamos y teníamos experiencia. Cambios así suelen notarse, más todavía si se producen lesiones importantes que pasan factura, como ha sido el caso. El 10-1 de la Supercopa supuso un golpe duro del que el equipo, sin embargo, estaba sabiendo resarcirse, con jugadoras jóvenes que me han sorprendido y cuya aparición demuestra lo bien que se está trabajando para el futuro. La temporada va a permitir crecer al equipo, que es muy joven. Gonzalo Arconada no va a continuar como entrenador, pero espero que la persona que se haga cargo del grupo siga ayudando a que la Real se haga un nombre importante dentro de la liga.
¿Aspira a sentarse en ese banquillo en un futuro?
-Ojalá. Soy de la Real y me gustaría. Pero no pienso en ello. Las cosas llegan cuando tienen que llegar. Y ahora mismo me toca replantearme el futuro a corto plazo. Debo seguir formándome en el deporte, y luego la misma vida me indicará qué caminos tengo que ir tomando.
"¿El futuro del fútbol femenino? Ahora mismo siento incertidumbre. Esta crisis va a dejar rastro en todos los sectores”
