donostia - La Ertzaintza impidió una pelea entre ultras de la Real y el Espanyol. Según publicó El Confidencial Autonómico, los dos grupos, del RCDE Firm, del Espanyol, y de RSF Fans, de la Real, trataron de citarse para pegarse. Un grupo de 17 ultras del RCDE Firm, según el propio relato que hicieron para sus seguidores, estuvieron cerca de Anoeta, sin tener vigilancia policial y esperando un contacto de la peña rival. Incluso se acercaron al bar en el que tradicionalmente se junta Mujika Taldea, antes de los partidos. Allí los ultras del Espanyol se hicieron una fotografía y al ver que no tenían apenas oposición se marcharon.

Según su relato, un ultra realista se les acercó para pedirles “perdón por no dar la cara, que no son más de 25, que hemos ganado”. Y añaden que luego les pidió un número de teléfono: “Nos dice que nos llamará para quedar en un punto para pegarse y que van a conseguir más gente”.

Al parecer, esa comunicación no se llegó a producir. De hecho, días después ultras de ambos equipos se estaban retando y los del Espanyol decían que “todavía están esperando la llamada”. Siempre según la información, algunos ultras de la Real se mostraron a posteriori “avergonzados” en las redes sociales por no haber “dado la cara. Hace años no lo hubiéramos permitido”.

Después de horas sin vigilancia policial, finalmente agentes de la Ertzaintza rodearon a los radicales barceloneses y los estuvieron moviendo de un lugar a otro. Siempre según el relato de los ultraderechistas de RCDE Firm, al pasar junto a Anoeta empezaron a acercarse ultras de la Real, a los que definieron como “frikis, moros, niñatos con gorras planas haciéndose los chulos, chándals de Nueva York, garrulos”.

La Ertzaintza les acusó de haber intentado acercarse a ellos cuando estaban rodeados por agentes, por lo que les prohibió la entrada y les mandó de vuelta a casa escoltados hasta Zaragoza para que parasen. - N.G.