La vicepresidenta de la Comisión Europea, Dubravka Suica, valoró ayer la estrategia Etorkizuna Eraikiz de la Diputación de Gipuzkoa como ejemplo de innovación social y remarcó que los resultados obtenidos a lo largo de estos años evidencian el potencial del proyecto.

Una delegación de la institución guipuzcoana, encabezada por el diputado general, Markel Olano, y la diputada de Gobernanza, Eider Mendoza, presentó ayer en la delegación de Euskadi para la UE en Bruselas la estrategia Etorkizuna Eraikiz, en un acto en el que participaron responsables de instituciones comunitarias y expertos del ámbito académico.

Olano expuso la trayectoria de Etorkizuna Eraikiz, un programa creado en 2016 en un contexto internacional de “creciente desafección política y en la antesala del renacer de los populismos y las ideologías extremistas”.

A través de esta estrategia, Gipuzkoa apostó por una “nueva cultura política” basada en la colaboración y en “tender puentes” con una ciudadanía que “observa con recelo a la clase política y a las administraciones públicas.

En sus seis años de trayectoria, el proyecto ha implicado a más de 1.500 empresas, asociaciones, agentes de conocimiento y entidades y ha puesto en marcha 11 estrategias y centros de referencia en ámbitos como la nueva movilidad, la lucha contra el cambio climático y el envejecimiento poblacional.

Junto a ellos, Etorkizuna Eraikiz mantiene activos 46 proyectos experimentales que tienen como objetivo probar en entornos reales soluciones a asuntos como los nuevos modelos de atención a las personas mayores, la conciliación o la relación entre generaciones.

Pasar de las palabras a los hechos

Etorkizuna Eraikiz ha propuesto pasar de las palabras a los hechos, y “ofrece un espacio de participación y de experimentación idóneo para la construcción de la Gipuzkoa del futuro” con el que “achicar espacio entre política y ciudadanía”, remarcó Olano.

El diputado general expuso a la audiencia que la sociedad organizada de Gipuzkoa recibe cada año la invitación a presentar, de un modo libre, sus propuestas innovadoras y experimentales para hacer frente a cuestiones de futuro. Hasta la fecha, Etorkizuna Eraikiz ha contribuido a financiar 150 de estas experiencias. “Junto a ello, hemos abierto canales directos de participación para la ciudadanía: las asambleas ciudadanas, que estamos llevando a cabo en colaboración con la OCDE”. Se trata de procesos experimentales de democracia deliberativa organizados por la administración pública y en los que participan ciudadanos y ciudadanos elegidos por sorteo. “El objetivo es implicarles en la búsqueda de soluciones para retos de futuro que tienen respuestas complejas. Hasta la fecha, hemos llevado a cabo dos, uno en Tolosa y otro a nivel de territorio”, remarcó.

Además de todo ello, Etorkizuna Eraikiz se ha abierto al mundo a través de su dinámica de internacionalización, mantiene constantemente canales de comunicación y participación directos con la ciudadanía y ha consolidado un potente think tank, asentado como espacio de reflexión y debate sobre el rumbo que debe tomar Gipuzkoa y que sirve también para detectar amenazas y proponer soluciones a los retos del territorio. “Etorkizuna Eraikiz ha conseguido erigirse, en definitiva, como toda una llamada a la acción ante un mundo cada vez más cambiante y diverso”, insistió Olano.

“Abriendo de par en par las puertas de la participación a la ciudadanía e implicándola en la búsqueda de soluciones, conseguimos que mejore su grado de conocimiento sobre las administraciones públicas y la política, y les hacemos partícipes directos del esfuerzo colectivo que estamos haciendo para hacer frente a los grandes retos de futuro Y esto, a medio y largo plazo, significa una mejora de la confianza y una reducción del alejamiento ciudadano y, por extensión, un fortalecimiento de nuestro sistema democrático”, concluyó.