Tendinopatia rotuliana en la rodilla derecha. Por ese motivo, Unai Laso declinó participar en el tercer, e intrascendente, partido de la liguilla de cuartos de final del Manomanista. Era una cuestión de precaución y descanso, nada más. Su participación en la semifinal del sábado ante Jokin Altuna en el frontón Atano III de Donostia –que registrará un lleno– no se verá mediatizada. Las molestias “agudas” quedan fuera de la ecuación. Explica el delantero de Bizkarreta-Gerendiain que “llevan tiempo dándome guerra, pero intento llegar bien a cada partido. Necesito descansar y no entrenar tanto. Me está yendo bien y prefería parar para estar mejor”. El errotarra no quiso entrar en detalles del tiempo que lleva arrastrando los dolores en la rodilla derecha, pero considera que “en verano quizás tenga tiempo para parar un poco más y recuperarme al cien por cien”. 

Abunda el campeón del Cuatro y Medio que es una dolencia que “me permite jugar tranquilamente”. El problema viene a la hora de ensayar. “No puedo entrenar al cien por cien, pero no hay excusas. El sábado vendré a por todas a la semifinal”, reseña Laso, quien añade que “muchas veces prefiero descansar a entrenar fuerte, porque puedo acabar molido”. 

El último encuentro del navarro fue el 26 de abril. Desde entonces, clasificado y con la suspensión de la cita ante Aitor Elordi, el de Baiko reconoce que no ha hecho sesiones fuertes. “Hice un poco de técnico la semana pasada. Sobre todo, me centré en sacar”, declara Laso. Este martes aprovechó la mañana para ejercitarse junto a Aitor Aranguren. Hicieron un partidillo y “sudaron” para “coger caja”. Asimismo, reconoce que ha hecho “pocos entrenamientos con sparring”, debido a que viene “rodado” del Parejas. “Es suficiente con coger un poco las distancias. Entrenar demasiado nunca me ha gustado, porque puedes llegar saturado al partido. Trato de tomarme las cosas con tranquilidad, hacer los ensayos que tengo que hacer e intentar estar fresco y con ganas”, argumenta Unai

"Todos tenemos molestias"

Respecto al estado físico del navarro, Jokin Altuna, su adversario y único representante de Aspe en las semifinales del Manomanista, espera al “mejor Laso”. “Sé que tenía molestias de antes. Leímos que se hizo la lesión dos días antes del comunicado, pero antes ya andaba con dolor. Aun así, hemos visto los partidos que ha hecho. Fíjese qué Artola estamos viendo y Unai le ganó. Le veo centrado y jugando mucho”, declara el campeón amezketarra, quien desbroza que “cada uno sabe las molestias que tiene mejor que nadie y yo no soy nadie para decir qué tiene. Sé que todos los deportistas tenemos molestias y que no miente, pero sé que va a jugar muy bien y saldrá a tope”. 

Desde que derrotó por 22-4 a Darío en su partido clave en cuartos, Altuna III ha dispuesto de quince días para prepararse. Su hoja de ruta: “El jueves pasado hice un entrenamiento técnico, el domingo uno mano a mano y este miércoles haré otro técnico”.

Jokin Altuna. Arnaitz Rubio

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Altuna III opta por material más pesado

Por otro lado, no hubo problemas con el material en la liturgia que se celebró este martes en el Atano III. Hubo expectación. El guipuzcoano se decantó por pelotas más pesadas (105,9 y 106,1 gramos) que su adversario (105,2 y 105,4 gramos). “Son parecidas. Igual una de Jokin anda más, pero me han gustado”, reflexiona Laso. La mayoría eran de “cuero marrón” y les van “bien a los dos”.