donostia - Situada en plena calle Elkano donostiarra, Testone es una tienda especializada en algo muy curioso: hojas metalizadas. Son verdaderas joyas que realizan a mano las argentinas Alejandra Testone y Nelsy Jimenez desde hace más de 25 años.

Llegaron a Euskadi allá por el año 2000 y desde entonces han vendido su producto en ferias de artesanía, a lo largo de todo el Estado. Sin embargo, el pasado 28 de abril decidieron abrir las puertas de su propia tienda con el objetivo de dar a conocer aún más su bisutería.

Un producto muy original que consiste en el metalizado de hojas naturales, semillas o conchas. “Lo que hacemos es bañarlas en plata, cobre u oro de 24 quilates, y después lo aplicamos a la bisutería: collares, pulseras, broches, anillos, pendientes?”, explica Nelsy. Lo hacen, además, con cualquier hoja que su cliente les demande, de manera que se convierte en algo muy personal. “Si tienes una hoja que para ti simboliza algo, y quieres que dure para siempre, es una manera muy bonita y original de conservarla como un tesoro”, dice.

La historia que hay detrás del proyecto es, además, muy curiosa. Comienza en Argentina a través de la propia Alejandra. Su padre era orfebre, y en su tienda ya vendían estas hojas metalizadas. Las hacía un alemán que tras la segunda Guerra Mundial desembarcó allí. Sin embargo, cuando este falleció, dejaron de venderlas. Años más tarde, Alejandra conoció a Nelsy, bioquímica de formación, y le propuso hacer esa labor de metalizado de hojas, que tiene una parte física y química muy importante. Lo probaron y les encantó. Para Nelsy “es un trabajo muy unido a la naturaleza” y por eso le apasiona.

Como anécdota, destacan una muy curiosa. “Metalizamos una rama, con sus bellotas, en cobre, pero dejamos una de las bellotas en oro, ya que simboliza la luz, quien germinará de nuevo el árbol. Después lo hicimos broche y un día se lo mostramos a la escritora Toti Martinez de Lezea. Le gustó tanto, que escribió un relato inspirándose en él”. Hoy ese relato y el propio broche se encuentran en su tienda, donde cualquiera de sus clientes puede verlo y leerlo. - N.G.