El campo de fútbol y rugby de Puio, en Aiete, cambiará en las próximas semanas su césped artificial, después de que la mesa de contratación del Ayuntamiento de Donostia adjudicase la pasada semana la obra a la empresa Ouri Entretenimientos por 283.613 euros, IVA incluido.

Actualmente, el campo deportivo de Puio tiene una moqueta de césped artificial que se colocó en 2010 sobre una base de asfalto, con rellenos de caucho y arena. Sin embargo, según explican fuentes de Donostia Kirola, el paso del tiempo ha hecho mella en la superficie y "se observa un importante deterioro de la moqueta de hierba, así como del relleno de caucho existente".

Por ello, la entidad deportiva ha visto necesario sustituir el sistema completo de hierba artificial y ha convocado un concurso al efecto.

El nuevo césped tiene que seguir permitiendo la práctica de rugby, además de la de fútbol, por lo que contará con las características necesarias para posibilitar su homologación para el deporte del balón oval, según lo establecido en la regulación 22 del World Rugby.

El campo de Puio es el último que los céspedes artificiales de Donostia Kirola que falta por renovar. Queda también el de Herrera, que no se cambiará ya que desaparecerá cuando se construya el del Merkear, también en el barrio de Altza, en el entorno de Lau Haizeta.

En los últimos años se ha ido cambiando la hierba artificial de los campos de Martutene, Berio, César Benito y Matigoxotegi.

La superficie de hierba artificial de Puio es de 110,40 x 62,2 metros. Tiene marcaje para rugby, para campo de fútbol 11 y para dos campos transversales de fútbol 7. También cuenta con un espacio de forma trapezoidal de 285 metros que se usa para entrenamiento, cuya superficie también se renovará.

La sustitución de la hierba artificial comenzará en las próximas semanas. Primero se retirará todo el material y equipamiento deportivo del césped, como porterías, banderines de córner, banquillos, etc... Después se levantará la moqueta actual, junto con el caucho y la arena, y después se instalará una base elástica de 20 milímetros de espesor, excepto en la zona trapezoidal, además de los rellenos de caucho y arena.

Finalmente se marcarán las líneas de las distintas modalidades deportivas que se pueden practicar en el espacio, según las reglas dictadas por las federaciones correspondientes.

Para terminar se recolocará el material y equipamiento deportivo retirado para la obra y se solicitarán los certificados favorables para los deportes previstos en la cancha.