Ana Obregón vivía hace tres años el momento más duro de su vida con el fallecimiento de su hijo Aless, sin embargo, ahora la televisiva ha vuelto a sonreír tras sus años más difíciles gracias a su nieta, Ana Sandra, que llegaba al mundo el pasado mes de marzo mediante gestación subrogada. 

La niña se ha convertido en la gran alegría de la vida de Ana, que no puede evitar presumir de ella, muy orgullosa, en redes cada vez que tiene ocasión, y ahora, cuando Anita está a punto de cumplir nueve meses, la intérprete ha celebrado su bautizo, un día inolvidable que ha vivido junto a sus más allegados.  

ANA OBREGÓN, RADIANTE EN EL BAUTIZO DE ANA SANDRA 

Ana Obregón reunía este domingo a sus familiares y amigos en una íntima ceremonia celebrada en la Parroquia de Nuestra Señora de La Moraleja, en Madrid, muy cerca de su domicilio, para bautizar a su nieta, en una tarde en la que no ha faltado ninguno de sus más íntimos.

Celia, Amalia, Javier y Juan Antonio, los hermanos de la actriz, han estado a su lado en un día tan especial junto a sus hijos, demostrando que son una familia muy unida, aunque ellos no han sido los únicos, Susana Uribarri y Raúl Castillo, grandes amigos de Ana tampoco han querido perderse una fecha tan señalada para ella. 

El gran momento del día llegaba poco antes de las cinco de la tarde, cuando Ana Obregón hacía aparición en la iglesia con Anita en brazos, muy sonriente y emocionada, acompañada por su maquillador Alberto Dugarte, y enfundada en un favorecedor conjunto rosa siguiendo la tendencia ‘barbiecore’. 

Por su parte, la pequeña ha lucido el mismo traje con el que su padre, Aless Lecquio, llevó en su día, al igual que el resto de niños de la familia, aunque tal y como la misma Ana desveló hace unas semanas a la revista ‘¡Hola!’, tuvo que hacer algunos arreglos al traje debido a que la niña se ha bautizado con más meses que otros pequeños de la familia. 

El vestido que ha lucido Ana Sandra para la ceremonia está confeccionado por tela de hilo blanco, sobrecapa, puntilla y encajes bordados a mano y decorado con cintas de raso. 

Además de Ana Obregón y Anita, los otros dos protagonistas de la jornada han sido los padrinos de la pequeña, que estaban muy unidos a Aless. 

Celia Vega-Penichet, prima de Aless Lecquio, ha ejercido como madrina, mientras que Giacomo Ugarelli, el mejor amigo del hijo de Ana Obregón, se ha convertido en su padrino.

Un bautizo muy especial en el que, sin embargo, ha contado con una gran ausencia, la del abuelo de la niña y padre de Aless, Alessandro Lecquio, cuya presencia habría sido toda una sorpresa, aunque la televisiva no ha dejado de intentarlo y en los últimos meses ha hecho varios llamamientos públicos al padre de su hijo para que conozca a Anita.