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Eduardo Prieto Iglesias

“Quien crea que el VAR solucionará todas las polémicas no ha entendido nada”

Prieto Iglesias explica el proceso de especialización que viven los árbitros que trabajan desde la sala VOR

“Quien crea que el VAR solucionará todas las polémicas no ha entendido nada”Iban Aguinaga

Eduardo Prieto Iglesias (Pamplona, 1981) es el nuevo responsable del VAR dentro del renovado equipo del Comité Técnico de Árbitros (CTA). El navarro, que cuenta con experiencia arbitrando en Primera División, llega con la idea de apostar por la transparencia y la pedagogía, para no solo lograr un peritaje brillante, sino también para hacer entender al espectador qué se está pitando.

¿Cómo se siente tras su nombramiento en el CTA?

Estoy muy contento y muy ilusionado, porque sigo vinculado a lo que me gusta. Es mi esencia, el arbitraje, lo que más me gusta hacer en la vida. Es mi hábitat natural, y ahora encima con la suerte de tener responsabilidades en la toma de decisiones. Son tiempos de cambio, y tenemos oportunidades de poder hacer cambios y enfocar el arbitraje hacia donde nosotros queremos que vaya. Es el momento.

¿Cuál es su experiencia dentro del videoarbitraje?

Estuve dos años como árbitro específico. Cuando empezó el VAR íbamos compaginando arbitraje de campo y de VAR, y cuando fue evolucionando se enfocó en especializar al árbitro que estaba en el VAR, que solo fuese especialista en eso, como pasa por ejemplo con los árbitros asistentes. Ese es su único cometido. Yo estuve dos años y nos especializaron haciendo partido y formación, solamente haciendo eso. Así es como se adquiere experiencia, velocidad, olfato... Y mi última etapa de árbitro fue en el VAR.

¿Cuáles son sus funciones?

Yo soy el responsable del proyecto VAR en España. Esto implica que tengo que hacer que este cuerpo específico de árbitros especializados, o VAR Pro que decimos nosotros, sea lo mejor posible, periten lo más rápidamente posible y den el mejor servicio al fútbol. Yo como su responsable tengo que facilitar las mejores herramientas y condiciones posibles. Yo coordino tanto la estrategia deportiva como el peritaje técnico, que es más operativo. Me encargo de que tengan las mejores cámaras, herramientas y un criterio de peritación mejorado.

¿Supone el mayor reto de su carrera profesional?

Ahora mismo, sin ninguna duda. Todo es muy ilusionante, pero conlleva una responsabilidad enorme. El arbitraje profesional está basado en el VAR, y las decisiones más importantes pasan por las manos del VAR. Debe ser lo más excelente posible, y esto es un reto. Lo que pasa por las manos del VAR es lo que acaba decantando el partido. Hay que tener en cuenta que algunas jugadas tienen un matiz interpretativo, una escala de grises, y es la mayor dificultad que tenemos. Nuestra labor es intentar aclarar y definirlo para que todos los agentes involucrados en el fútbol lo tengan claro. Queremos ser previsibles y consistentes.

¿Cree que el VAR ha ayudado a mejorar el fútbol?

Sin ninguna duda. No es una cuestión subjetiva, son datos. Ahora hay muchos menos errores claros y manifiestos que antes se cometían porque no se podía ver todo, cabía el error humano. Eso no significa que dejen de suceder, pero había situaciones claras o manifiestas que antes se nos podían colar, pero ahora ya no pasa. No se marcan goles con la mano, las simulaciones no acaban en penalti... Los números están ahí. Objetivamente, el VAR lo ha mejorado, pero quien crea que va a solucionar todas las polémicas del fútbol no ha entendido nada. Vino para optimizar el arbitraje, para aspirar a la excelencia, pero hay jugadas donde cabe la interpretación y no cabe que sea blanco o negro, ya que ambas partes pueden tener su parte de razón. Siempre voy a tener una franja de error, pero mi trabajo es reducirla.

Además, está el tema de la falta de consistencia en algunos criterios... ¿Cómo se puede mejorar?

Es cierto que en el mundo del fútbol puede haber jugadas similares que en una ocasión se pitaron y en otra no, y puede deberse a un error arbitral, eso hay que reconocerlo. De todos modos, en la mayoría de los casos no es la misma jugada. Hay matices y consideraciones que los expertos manejamos. Pero no sirve de nada, y creo que es un punto de mejora, tener los criterios en casa, a nivel interno, y que el mundo del fútbol no lo entienda. Estamos prestando un servicio, no sirve de nada quedarnos el conocimiento para nosotros.

¿Cómo lo haría?

Creo que es necesario mantener una labor pedagógica, explicar el porqué de una mano que he pitado o he dejado de pitar, por ejemplo. La gente no tiene por qué saber cada norma y cada matiz, nosotros sí, y los vamos a explicar. Creo que es un cambio revolucionario. Queremos que los aficionados sepan qué está pasando. Siempre cabe también el lado emocional del fútbol, y puede que, aun con la explicación, el aficionado quiera barrer para casa y tu prisma de visión no sea del todo neutral. No venimos a convencer, pero venimos a explicar lo que pasa. Nosotros creemos en la transparencia.

¿Está a favor de que los árbitros den una rueda de prensa después de los partidos al igual que jugadores y entrenadores?

Sobre el papel la teoría está bien, pero, ¿es realmente necesario para explicar las decisiones? Creo que la voluntad es que se expliquen las jugadas polémicas para poder meter el cuchillo.

¿Un ejemplo podría ser lo que sucedió en la final de Copa del Rey?

Es un ejemplo. Los compañeros que tenían la misión de arbitrar el partido hablaron abierta y libremente sobre cómo se sentían y cómo pensaban, y a partir de ahí se originó mucho ruido y estalló la polémica. Ese ruido no beneficiaba a nadie, no hacía bien al mundo del fútbol. Estoy totalmente a favor de que el árbitro dé explicaciones, pero habría que darle una vuelta al formato. Por eso, otro de los pilares que tenemos en el equipo es mantener un perfil para las relaciones institucionales y la comunicación, en este caso mi compañera Marta Frías.

¿De qué se encarga exactamente?

Va a ser la encargada de explicar las jugadas. Ya vamos entrando en el esquema de explicar la polémicas. Ya tenemos a una persona encargada. Ahora toca ver con qué cadencia, si va a ser después del partido, cada semana, cada 15 días, si va a ir con más gente o con algún responsable... pero todo viene por el pilar de comunicar y explicar con transparencia. Estamos abiertos a que haya una evolución.

¿Cree que se está polarizando el odio hacia la figura arbitral?

Este último año, e incluso el anterior, probablemente sea el más convulso para el arbitraje español. Llevo unos 16 años vinculado al arbitraje profesional y, que yo recuerde, nunca he vivido un año tan duro para el estamento arbitral como este. Esto incluye a todos los organismos arbitrales. Fue increíblemente duro, los ataques al colectivo fueron inadmisibles. Ahora, con el cambio de los miembros del CTA, se intentará hacer borrón y cuenta nueva para que todos los participantes del mundo del fútbol se puedan entender, bajando la temperatura y para que podamos trabajar con tranquilidad y con calma. Entendemos que en nuestro trabajo haya críticas, eso lo entendemos y lo asumimos, pero dentro de la razón y sin cruzar líneas rojas, que creo que el año pasado se traspasaron. No es bueno para el fútbol.