La startup Semi Zabala ubicada en el polígono Eskusaitzeta de Donostia se ha propuesto situar la tecnología guipuzcoana en la vanguardia del sector aeroespacial y, con este objetivo, ha previsto crear una planta “de referencia” en la capital guipuzcoana para la fabricación y pruebas de semiconductores de potencia avanzados destinados a este sector, en concreto a los satélites. La amplia experiencia de su director general, Simon Wainwright, quien con anterioridad creó una empresa con la misma actividad en Boston (EEUU) avalan el proyecto, al que sólo le faltaba obtener la necesaria financiación que se cerró el pasado mes de abril tras más de un año de conversaciones.

Semi Zabala ha informado del cierre de su ronda de financiación que ha conseguido 8,51 millones procedentes, en su mayoría, de entidades vascas, interesadas en la proyección de una idea empresarial que emplea un material avanzado, el nitruro de galio, para fabricar los semiconductores de potencia que genera ahorros por ser más ligero y robusto que los habituales, aspectos muy valorados por la industria aeroespacial. Exportar esta tecnología de EEUU a Europa fue una propuesta muy bien acogida por la Agencia Espacial Europea ESA, más aun en un contexto en el que “la soberanía tecnológica es estratégica”, recuerda Wainwright.

Inversión público privada

El interés se demuestra en que en la ronda de financiación han participado tanto entidades públicas como privadas. La captación se ha organizado en tres partes. La primera de ellas ha sido una operación de equity, es decir, de adquisición de acciones, en la que han participado el fondo donostiarra AP Tech Ventures 1 y 2 con 2,2 millones y 910.000 euros respectivamente, junto con Clave Mayor, un fondo del Grupo Mondragon que ha aportado 500.000 euros.

A este grupo se le une Seed Gipuzkoa, del Gobierno Vasco gestionado por la Spri, que invierte un millón de euros, y la sociedad de garantía recíproca vasca Elkargi con 200.000 euros. En conjunto, 4,8 millones de euros que proporcionan a estos inversores la entrada en el capital de la empresa.

Firmantes de la ronda de financiación celebrada por Semi Zabala. N.G.

Una segunda parte corresponde a nota convertible, por la que los inversores no reciben acciones pero sí el compromiso de poder comprarlas más adelante a un precio más favorable o recibir el dinero invertido más intereses. En este apartado ha participado Littelfuse, una compañía que cotiza en el Nasdaq con una aportación de 500.000 euros.

La operación se completa con el acceso de Semi Zabala a deuda bancaria por valor de 3,2 millones de euros. Luzaro, entidad en la que participan el Gobierno Vasco, Kutxabank, Laboral Kutxa, Banco Sabadell, Abanca Bankoa y Enisa, ha aprobado un préstamo de 1,2 millones, mientras que Elkargi, CaixaBank, Caja Rural de Navarra y el Instituto Vasco de Finanzas, del Gobierno Vasco, prestará los dos millones restantes.

Proyecto

Semi Zabala está inmerso en el proyecto Beyond the Power que, en palabras del director general Simon Wainwright, “posicionará a Euskadi y a Europa en la vanguardia del diseño y fabricación de componentes críticos para la nueva era del espacio y la electrónica de potencia”.

Su producto basado en materiales emergentes, además de procurar un ahorro de costes proporciona “una alta confiabilidad, una larga durabilidad y un rendimiento eficaz”, asegura la firma con sede en el polígono Eskusaitzeta de Donostia, que considera que el cierre de esta ronda de financiación constituye “un hito clave para acelerar la industrialización de nuestros dispositivos” y avanzar en la consolidación de su planta guipuzcoana.

Talento local

Otro de los aspectos relevantes de la actividad de Semi Zabala es el compromiso que su director general afirma tener con el talento local, que constituye “nuestra apuesta”. En la actualidad, esta empresa trabaja en proyectos europeos integrada en consorcios con importantes compañías como Sener o Airbus.

Semi Zabala se sitúa así entre las empresas guipuzcoanas que despuntan en el ámbito aeroespacial, que requiere de una tecnología muy avanzada. Uno de los líderes de este colectivo es Added Value Industrial Engeenering Solutiones, AVS, que desde su sede en Elgoibar protagoniza noticias como la más reciente, en julio del año pasado, lanzó al espacio Lur-1, el primer satélite 100% vasco de la historia.