El ente público que gestiona fondos para ayudar a empresas, Cofides, ha aceptado una quita a la deuda de 15 a 8,5 millones de euros a Astilleros Balenciaga, han confirmado a EFE fuentes próximas a la operación.
Las fuentes han precisado que se trata de un "preacuerdo", ya que todavía quedan "flecos pendientes" que habría que cerrar con otros acreedores para que pueda encajar y salir adelante, entre ellos algunas entidades financieras que todavía no habrían dado su visto bueno.
Antes del 31 de marzo
De momento, la quita parcial de la deuda por parte de Cofides, que contaría con la aprobación del administrador concursal de Astilleros Balenciaga, despeja gran parte del camino para encontrar algún inversor antes del 31 de marzo y evitar el ERE de extinción de la firma.
Fuentes próximas a la compañía han recalcado que es cierto que con la quita parcial de Cofides se abre "la puerta" para llegar a buen puerto, pero han recalcado que el acuerdo es mucho más amplio, atañe a más instituciones y "no está escrito ni cerrado".
Han explicado que la decisión de Cofides ha permitido a la firma desatascar la venta de dos barcos fabricados en el astillero de Zumaia por un importe de 17 millones de euros, parte del cual se destinará a abonar la deuda pendiente con el ente público.
Han asegurado que por la empresa han pasado en los últimos ocho meses "numerosos inversores" aunque en este momento hay dos realmente interesados, en un "análisis avanzado", a los que habría que allanar el camino para reflotar la empresa y salvar la plantilla, integrada por 70 trabajadores.
El comité de empresa, que será informado por el administrador concursal este mismo viernes en una reunión en Zumaia, insiste en que hay dos inversores "muy interesados" en coger las riendas del histórico astillero.
Las mismas fuentes ha precisado que el acuerdo con Cofides se ha logrado tras la reunión que hace dos días mantuvieron en Madrid el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, y el consejero de Industria, Mikel Jauregi.
"Sensación agridulce"
Por su parte, el alcalde de Zumaia, Iñaki Ostolaza, ha dicho que la aceptación de la quita parcial es "el primer escollo, pero nos quedan más", y ha considerado necesario "un acompañamiento" a los posibles inversores por parte de las instituciones para "llevar adelante una operación como la de Talgo".
En declaraciones a Radio Euskadi, Ostolaza ha dicho que la primera valoración del acuerdo alcanzado es "positiva" porque "uno de los escollos principales para para que hubiera una solución era Cofides", pero ha reconocido que la sensación que tiene es "un poco agridulce" porque es "una buena noticia, pero todavía no está firmada". Por ello, ha dicho que le preocupa "un poco" que este tipo de cuestiones "salgan a la luz cuando tiene que ser un trabajo discreto".
El alcalde ha recordado que el pasado lunes, en las Juntas Generales de Gipuzkoa, donde comparecieron los trabajadores en la comisión de Promoción Económica y Proyectos Estratégicos de las Juntas Generales de Gipuzkoa, "una de las cosas que se comentaron, por parte de la portavoz del PSE-EE, es que había dos inversores, cosa que parece ser que es así", pero ha apuntado que "también hubo una intervención por parte de la portavoz del PNV pidiendo que estos trabajos fueran discretos y, sobre todo, que se evitarán titulares, y hemos tenido la primera en la frente".
Ostolaza ha reiterado que, por un lado, le alegra "un montón que se haya dado este este paso, que Cofides haya por fin accedido a que esto sea viable", aunque ha dicho "viene un poco tarde, pero mejor tarde que nunca".
El alcalde ha dicho que la plantilla estaba "muy preocupada, con la espada de Damocles del ERE de extinción que vence el 31 de este mes", por lo que "necesitaba noticias positivas".
Acompañamiento a los inversores
En cualquier caso, ha dicho que la aceptación de la quita parcial de la deuda por parte de Cofides "es el primer escollo, pero nos quedan más", porque, ahora, "los posibles inversores que haya sí que necesitan un acompañamiento, en este caso, tanto del Ministerio de Economía y de Trabajo, a través de Cofides, y del Gobierno vasco y la Diputación por parte de las instituciones vascas", para "llevar adelante una operación como la de Talgo, en la que al inversor privado se le acompaña desde el Gobierno vasco y con las instituciones financieras".
"Esperemos que todo llegue a buen puerto", ha confiado, para pedir a las instituciones implicadas que, "como pidieron en Juntas Generales, hay que hacer un trabajo discreto para que el resultado sea positivo".
Camino discreto
Tras asegurar que tanto el Gobierno Vasco como desde el Ministerio de Economía "están trabajando positivamente en este camino, desde la discreción", ha dicho que "todos necesitamos noticias positivas, pero mejor cuando ya esté firmado que no con una posible firma".
Ostolaza ha recordado que la plantilla de Astilleros Balenciaga es de 71 trabajadores, pero "cuando estaba en plena actividad en verano de 2022 entraban más de 600 personas al astillero", lo que "significa que todas aquellas empresas subcontratadas del sector naval que haya en Bizkaia, en Gipuzkoa y en el Cantábrico estaban trabajando aquí".
El alcalde no cree que con los nuevos inversores se vaya a la actividad que hubo en 2022, pero sí que pueda haber "250 o 300 personas trabajando en el astillero", lo que es "un motor económico muy importante, no solo para Zumaia, sino para la comarca y para la provincia y y para todo el todo el sector naval".