Las ventas de las empresas guipuzcoanas se han incrementado en el primer semestre del año un 2,8% con respecto al mismo periodo del año anterior, en una evolución positiva que sin embargo se ha ralentizado por las caídas consecutivas de los tres últimos meses. En junio respecto al mismo mes de 2022 descendieron otro 2,8% motivado por el mal comportamiento de las exportaciones.
La caída en la facturación en el mes de junio está motivada por el mal comportamiento de las exportaciones
El departamento foral de Hacienda y Finanzas ha hecho público el informe mensual sobre la evolución de las empresas con datos que ellas mismas aportan para cumplir con sus obligaciones fiscales, en el que se constata que el dinamismo inicial de la facturación comienza pararse y adquiere un signo negativo. La buena evolución se sustenta en el primer trimestre del año, mientras que el segundo tiene una incidencia a la baja, a la espera del comportamiento de la economía en el segundo semestre del año.
Hasta junio, las empresas del territorio vendieron 2,8 puntos porcentuales más que en el mismo periodo del año anterior impulsadas por el consumo interno, que creció un 3,9% en tanto que las exportaciones cayeron un 1,2%. El tirón de las ventas interiores se repite en el caso de comparar solo junio con el mismo mes de 2022, donde la situación cambia por completo. Si bien las compras del mercado interior subieron 2,1 puntos porcentuales, las exportaciones sufrieron una brusca caída de casi diez puntos.
EMPLEO
A pesar de ello, el mercado laboral no se ha visto resentido y el número de personas perceptoras de rendimientos de trabajo crece un 1,5%, gracias sobre todo a los servicios donde se focaliza la mayor subida, mientras que en la construcción se destruye empleo durante el primer semestre del año.
