donostia - El Gobierno Vasco constata "el fin de la desaceleración y el comienzo de la estabilización en la economía vasca", según el informe publicado este lunes por el Departamento de Hacienda y Economía. Todas las previsiones económicas dadas a conocer en los últimos días dicen que la economía vasca crecerá en 2020 por encima del 1,5%, y el Gobierno Vasco se suma al relativo optimismo con una previsión del 1,9%, una décima inferior a lo pronosticado en septiembre.

El Gobierno Vasco basa su optimismo en la confianza en que se atenúe la guerra comercial entre Estados Unidos y China, así como en que se clarifique la salida del Reino Unidos de la Unión Europea. Menos incertidumbres en el horizonte ayudarán a la inversión y, en el caso industrial, darán aire a Alemania, principal destino, junto con Francia, de las exportaciones industriales vascas.

El Ejecutivo liderado por el lehendakari Iñigo Urkullu estima que el Producto Interior Bruto de la Comunidad Autónoma Vasca alcanzará una tasa de crecimiento del 1,9% en 2020, una cifra ligeramente más optimista que la de la entidad financiera Laboral Kutxa que pronostica un crecimiento económico del 1,8% en la CAV, y del 2,2% en el caso navarro. El BBVA también considera que el PIB del conjunto de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa repuntará este próximo año en torno al 1,7%.

Con estos datos encima de la mesa, el consejero vasco de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu, aseguró ayer en una entrevista en Onda Vasca que el próximo ejercicio de 2020 será, en su opinión, "un buen año económico" para Euskadi y en línea con esta observación incidió en que el crecimiento económico previsto que se va a dar permitirá seguir generando empleo y "aumentar la productividad".

El máximo responsable de las cuentas del Ejecutivo también hizo referencia al tema impositivo y al eterno debate entre ingresos y gastos y recordó que "para poder recaudar más, hay evidentemente que subir los impuestos" y que decir lo contrario "es el cuento de la lechera".

Aunque el PIB vasco va a crecer en 2020 menos que en estos dos últimos ejercicios y se va a acercar al potencial teórico de un territorio como Euskadi, con el tejido industrial existente, sin crecimiento poblacional y en fase de envejecimiento, las perspectivas para el próximo ejercicio, según Azpiazu son positivas.

El consejero de Hacienda y Economía reiteró que 2020 que "va a ser un buen año económico" para Euskadi, ya que aunque el crecimiento "no será tan bueno como el de hace dos años, sí está en la línea de la tasa de crecimiento 2019". "Todavía va a permitir este crecimiento crear empleo y aumentar la productividad", indicó.

Según el Informe de la Economía Vasca correspondiente al tercer trimestre de 2019 desglosado por Azpiazu, el crecimiento para 2020 ha sido rebajado "en una décima", pasando del 2 al 1,9% del Producto Interior Bruto. "Es un cambio mínimo que responde a los cambios del entorno internacional y español, que nos afectan", afirmó el consejero.

En opinión del representante del Gobierno Vasco pese a la desaceleración de estos últimos meses se entra "en un momento de estabilización que nos permitirá crecer en el entorno del 2% en próximos años, crear empleo y aumentar la productividad".

En referencia a uno de los elementos que mejor reflejan la marcha de la economía, el empleo, Pedro Azpiazu indicó que el ritmo de crecimiento del empleo "va a permitir que la tasa de paro vasca disminuya paulatinamente en los próximos meses".

El Gobierno Vasco espera un avance del empleo del 1,6% en 2019 y del 1,2% en 2020, tal y como estaba previsto en el informe previo de la Dirección de Economía y Planificación, lo que equivale a una creación de cerca de 15.500 puestos de trabajo en 2019 y de en torno a 11.500 empleos en 2020.

Respecto a la tasa de paro, las perspectivas han mejorado y se estima que se situará, en el 9,7% en 2019, y descenderá hasta el 9,6% en 2020, ambos años dos décimas por debajo de la anterior previsión

Azpiazu basó su mayor optimismo en la aclaración del panorama geopolítico internacional tras episodios como las elecciones británicas. "Las incógnitas que había generaban incertidumbre y desestabilizaban las previsiones macroeconómicas, pero parece que se encauzan, lo que genera cierta calma en el ámbito económico".

Ahorrar Azpiazu también destacó en un símil de la fábula de la cigarra y la hormiga la importancia de ahorrar y prepararse en las épocas de bonanza para cuando cambie el ciclo. Así, destacó que, con la crisis, se aumentó la deuda pública y defendió que ahora, con el "pequeño superávit" que se produce cada año, hay que dedicarlo a rebajar la deuda pública por "si vienen mal dadas" en el futuro. "Hay que ganar futuro en ese sentido y es una política razonable", afirmó.

Por lo que respecta al tema de los impuestos, Pedro Azpiazu recordó existe el compromiso de analizar la fiscalidad vasca en 2020 y valorar los resultados de la anterior reforma, de manera que "en función de la situación, se pueda abordar una reforma que permita financiar los retos de futuro". También recordó que la Ley de Aportaciones establece la manera de repartir los recursos entre las instituciones y señaló que el interés de todos pasa por "tener los recursos suficientes para que las instituciones podamos funcionar".

1,9%

El Informe de la Economía Vasca correspondiente al tercer trimestre de 2019 recorta el crecimiento del Producto Interior Bruto de la Comunidad Autónoma Vasca para 2020 "en una décima pasando del 2 al 1,9%. Es un cambio mínimo, según el Gobierno vasco, que responde a los cambios del entorno internacional y español. Con todo la economía vasca entrará en un momento de estabilización que permitirá aumentos del PIB del orden del 2% en los próximos años. En este contexto, las mismas fuentes consideran que es factible crear empleo y aumentar la productividad. Todo ello va a permitir que la tasa de paro disminuya paulatinamente en los próximos meses y años

Crecimiento. Los informes de coyuntura y las previsiones que manejan los servicios de estudios de las principales entidades financieras vascas auguran para el próximo ejercicio de 2020 un crecimiento del Producto Interior Bruto de la Comunidad Autónoma vasca de entre el 1,7%, según el Observatorio regional del BBVA, y el 1,8%, de Laboral Kutxa.